Cuando era pequeña, mi madre prefería hacer la carne guisada, decía que picarla era estropearla y que perdía todo su sabor, por eso hacía pocas veces las albóndigas. Por suerte, hoy en día, puedes comprar la carne recién picada y muy fresca. Y se sabe que no pierden ninguna de sus vitaminas.
Parece un plato muy complicado, que se tarda mucho en hacer, pero en lo que más se tarda es en freír las bolitas, ya que en guisarlas sólo se necesitan 5 o 10 minutos, ya que la carne ya está frita.
Para que mis hijos comieran las albóndigas, las llamábamos "bolitas pelotonas", y después de los años, hay días que siguen llamándolas así.
INGREDIENTES:
1 kg. carne picada
2 huevos
1 lata foigras
leche
miga de pan
ajo y perejil
harina
aceite de oliva
sal gorda
PREPARACIÓN:
En un bol grande echamos los huevos con un chorro de leche y lo batimos bien, añadimos la miga de pan (a poder ser del día anterior) y después el foigras, removemos hasta que empape bien toda la mezcla. Le añadimos la carne y lo mezclamos todo bien.
En una sartén ponemos el aceite a fuego fuerte.
Vamos haciendo bolitas con la carne y las freímos en el aceite. Cuando estén doradas se pasan a una cazuela; así hasta terminar toda la carne.
En el aceite de freír las bolitas echamos un poco de harina, la diluimos y con un poco de agua hacemos una ligera velouté (que es una bechamel hecha con agua en vez de leche). La echamos sobre las albóndigas y ponemos ya al fuego.
Cubrimos con agua. Hacemos un machacado de ajo y perejil y se lo añadimos. Lo sazonamos al gusto y dejamos cocer unos 10 minutos.
CONSEJOS ÚTILES:
El foigras hace que las albóndigas estén más suaves y además le da un sabor diferente. Se puede cambiar el foigras por cualquier paté, así cada vez parecerán distintas.
También se pueden hacer con salsa de tomate, pero debemos tener cuidado , pues se ponen ácidas si las dejamos varios días.