Mi madre siempre hacía las albóndigas en salsa verde, nunca cambió el estilo, ni pensó en otra forma de hacerlas. Y las salían muy ricas!
Durante años yo hice lo mismo, no cambiaba la forma de hacerlas. Pero con el tiempo me dí cuenta que tenía que evolucionar, no me podía estancar en hacer las cosas como ella, aunque me guiara en su estilo.
Esta fue una de las primeras recetas que modifiqué y a partir de ahí empecé a hacerlo en todos sus platos. Siempre guiándome de lo que recordaba de ella, pero a mi manera.
INGREDIENTES
1 kg. carne picada
2 huevos
1 bote pequeño de foigras
Miga de pan
Leche
Jengibre y curry en polvo
Aceite de oliva
3 tomates
1/2 cebolla
1 bote pequeño de pimientos
ELABORACIÓN
Batimos los huevos con la leche y le añadimos un poco de miga de pan, hasta que empape toda la leche. Luego le incorporamos el foigras, un poco de jengibre y de curry en polvo (estos dos al gusto) y lo mezclamos bien. Por último, incorporamos la carne y lo amasamos bien con las manos, para que quede bien integrado y repartido.
Vamos haciendo las bolitas con la carne y las freímos en una sartén con abundante aceite de oliva. Reservamos en una fuente.
Por otro lado, escaldamos los tomates en agua hirviendo durante 3-4 minutos, para poder pelarlos bien.
En una cazuela, ponemos parte del aceite de freír las albóndigas y cuando esté caliente le echamos la cebolla, picada muy pequeña, rehogamos un poco y le incorporamos los tomates pelados y cortados en dados pequeños. Lo revolvemos un poco, para que se vaya evaporando el agua de los tomates y añadimos los pimientos bien picadines. Dejamos hacer unos minutos a fuego medio y le ponemos las albóndigas. Cocemos durante 10 minutos a fuego bajo y sazonamos al gusto.
CONSEJOS ÚTILES
Si vemos que tiene poco color la salsa, se le puede añadir un poco de tomate frito de compra. También le dará más textura.
Se puede triturar la salsa antes de añadir las albóndigas, por si no nos gustan los tropezones.
Añadele 1/2 pastilla de caldo de carne y le dará más sabor.