¿A quién no le apetece un pan recién horneado para comer? Y si hablamos de las famosas barras de pan francesas, las baguettes, seguro que no os podéis resistir. Quedan esponjosas por dentro y crujientes por fuera. ¡Una maravilla!
He utilizado la Thermomix para amasar pero podéis hacerlo a mano sin problemas.
INGREDIENTES:
- 330 g de agua
- 10 g de levadura prensada fresca desmenuzada
- 500 g de harina de fuerza (y algo más para espolvorear)
- 1 1/2 cucharaditas rasas de sal
- aceite para engrasar
ELABORACIÓN:
- Primero ponemos en el vaso el agua y la levadura fresca y templamos 2 min/ 37°C/ vel 2. Mientras tanto, engrasamos con un poco de aceite de oliva un bol y reservamos.
- Añadimos la harina y la sal y amasamos durante 2 min/ espiga (función amasar). Ponemos la masa en el bol engrasado. Cubrimos el bol con film transparente o un paño de cocina húmedo y dejamos reposar hasta que doble su volumen (entre 30-60 minutos aproximadamente, dependiendo de la temperatura de la habitación).
- Sobre una superficie ligeramente enharinada, cortamos la masa en tres piezas iguales con un cuchillo grande. Aplastamos un poco y damos forma de barra a cada parte de masa. Dejamos reposar sobre una superficie ligeramente enharinada. Espolvoreamos las barras con harina, las cubrimos con film transparente o con un paño de cocina húmedo y las dejamos reposar durante 20 minutos.
- Volvemos a aplastar suavemente cada barra para formar rectángulos procurando conservar las burbujas de aire que se hayan formado dentro. Volvemos a formar barras con los rectángulos de masa.Cogemos una parte y aplanamos con la base de la palma de la mano. Luego doblamos un tercio de la masa hacia dentro y sellamos pellizcando el borde de la masa con la punta de los dedos. Doblamos el tercio opuesto y sellamos de nuevo presionando un poco con los dedos. Doblamos el rollo por la mitad a lo largo y sellamos los dos lados juntos. Finalmente sellamos los extremos de la barra de pan con los dedos. Alargamos las barras para darles forma de baguette, rodándolas hacia delante y hacia atrás ejerciendo una ligera presión desde el centro de la baguette hacia los extremos, poniendo los dedos en forma de W. Ponemos las baguettes con el borde sellado hacia abajo sobre papel de hornear, levantando el papel entre cada baguette para crear una pequeña pared que las separe o sobre una bandeja de hornear baguettes que ya trae la separación. Esto ayudará a que las baguettes mantengan su forma y evitará que se peguen unas a otras al subir. Cubrimos las baguettes, sin apretar, con film transparente o un paño de cocina húmedo y las dejamos levar durante otros 45 minutos.
- 20 minutos antes de que acabe el tiempo de reposo, ponemos 2 bandejas de horno en la parte baja del mismo una en el travesaño más bajo y la otra en el que está justo encima. Precalentamos el horno a 250°C.
- Para comprobar si las baguettes están listas para hornear, las presionamos suavemente con la yema de un dedo. La marca dejada debería desaparecer lentamente. Si la masa recupera la forma muy rápido es que no ha subido lo suficiente. Si la marca permanece, habrá fermentado demasiado, en ese caso no subirá tanto al hornearse, pero aún así quedará bien.
- Preparamos un vaso de agua muy caliente en una taza. Con un cuchillo muy afilado, hacemos 3 cortes diagonales en la superficie de cada baguette. Deslizamos las baguettes, junto con el papel de hornear, sobre la bandeja precalentada situada más arriba. Rápidamente pero con cuidado, vertemos el agua caliente sobre la bandeja que está debajo para crear vapor y cerramos inmediatamente la puerta del horno para atraparlo. El vapor al principio del horneado es lo que provoca que la corteza de las baguettes queden crujientes. Horneamos durante 20 minutos a 250°C función horno de leña (calor sólo abajo) , o hasta que hayan tomado color dorado oscuro .Si las baguettes estuvieran ya bastante oscuras antes de terminar el tiempo de horneado, reducimos la temperatura del horno a 230°C. Si vemos que no se terminan de dorar por arriba, ponemos el horno en función arriba y abajo para que de doren por arriba bien. Dejamos enfriar las baguettes durante 20 minutos antes de comerlas. Se pueden congelar para consumir otro día sin problemas. ¡Están buenísimas!