Esta bechamel de calabacín es una receta de las llamadas de dieta. En realidad es como una crema de calabacín, de hecho yo me la como a cucharadas, pero se puede usar como bechamel de cobertura y al no estar preparada con harina es más ligera que la bechamel tradicional.
La receta hace años que la conozco, mucho antes de tener la thermomix. Entonces la hacía cociendo los calabacines en agua un rato y triturándolos con los quesitos.
No es una bechamel para croquetas, solo nos va a servir para cubrir una lasaña, unos canelones o unas verduras para gratinar.
Esta receta de la página oficial de thermomix es más completa, lleva leche y cebolla con lo cual es más nutritiva y además está muy rica.
INGREDIENTES:
300 gr de calabacín.
15 gr de cebolla
100 ml de leche desnatada.
15 ml de aceite de oliva.
2 quesitos light
Sal, pimienta y nuez moscada.
PREPARACIÓN:
Vertemos el aceite en el vaso y programamos 3 minutos a temperatura varoma y velocidad 1.
Añadimos la cebolla y los calabacines pelados y cortados en trozos y programamos 7 minutos a temperatura varoma y velocidad 1 1/2.
Incorporamos la leche, la sal, la pimienta y la nuez moscada ( un pellizco de cada) y programamos otros 15 minutos a 100º C y velocidad 1.
Por último añadimos los quesitos y trituramos 20 segundos a velocidad 5.
Primero calentamos el aceite.
Una vez caliente, echamos la cebolla y los calabacines y sofreímos.
Cuando estén tiernos añadimos la leche, la sal, la pimienta y le nuez moscada y cocinamos.
Por último agregamos los quesitos y trituramos hasta que nos quede una crema homogénea.
Tiene una textura espesa, cremosa y suave.
Como bechamel o como crema, la podemos usar de ambas formas.
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Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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