Con algunos sientes amor a primera vista, como me pasó con "Postres caseros", de Amanda Laporte, el librito que me tocó en el sorteo de Rosa en facebook. Fue pasar las páginas y querer hacer prácticamente todas sus recetas, pero sobre todo mi mirada iba una y otra vez hacia este bizcochito de chocolate. Ya sabéis mi amor por él y no podía estrenarlo de otra manera.
Casi siempre divido las recetas a la mitad para que no dure una eternidad sólo para los dos, pero como al día siguiente tenía pensado ir a pasar la tarde con mis sobrinas, aproveché y les llevé un buen trozo, que tengo que decir que les encantó.
INGREDIENTES:
185 gr. de chocolate negro fondant
85 gr. de mantequilla
6 huevos (separadas claras de yemas)
150 gr. de azúcar + 2 cucharadas para las claras
1 cucharadita de pasta de vainilla
1 cucharadita de ralladura de naranja
170 gr. de almendras molidas
cacao en polvo y azúcar glas para decorar
PREPARACIÓN:
Fundir el chocolate y la mantequilla al baño maría. Reservar.
Batir las yemas con el azúcar, la ralladura y la vainilla hasta que doblen volumen. Añadir el chocolate y mantequilla y batir hasta que se integre. Incorporar las almendras y mezclar bien.
Montar las claras con las dos cucharadas de azúcar a punto de nieve. Incorporarlas a la mezcla anterior con movimientos envolventes.
Verter la mezcla en un molde desmoldable de 22 cm. y con el horno precalentado a 180º hornear unos 50 minutos. (Yo lo puse en un molde de 24 cm. y lo tuve 40 minutos en el horno)
Desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Cuando esté fría podemos espolvorear con cacao en polvo (a mi me quedó fatal, porque no se en que estaba pensando y se lo eché en caliente) o azúcar glas.
Como ya está aquí San Valentín, le hice un corazón con azúcar glas. Ya veis que cualquier bizcocho lo podemos poner romanticón. Y por supuesto si lo hacemos en un molde de corazón, mejor todavía.
Al día siguiente está aún más rico, pero seguro que no podéis esperar...