Bocadillo de calamares, ícono de la tradición gastronómica madrileña

Hoy vamos a ver todo lo que debes hacer para preparar un Bocadillo de clamares, ícono de la tradición gastronómica madrileña, sobre esto último no cabe ninguna duda, ya que comerte un buen “bocata” de calamares es una de las tradiciones más madrileñas que pueden existir, así es, tanto así como tomarte un vermú con unas olivas, unas cañas, unas Patatas bravas o comerte un plato de Callos.

Dicen los datos que el primer bocadillo de calamares aparece en Madrid allá por el año desde1965, se cuenta también que es de influencia andaluza (descendiente del pescadito frito), corriente culinaria que se puso de moda en Madrid a principios del siglo XIX, que posteriormente con la llegada a la capital de migrantes de las costas, sobre todo del norte, todos ellos grandes consumidores de pescados, mariscos y otras hierbas, además de estar muy acostumbrados a cocinarlos. Estos, eran una gran mayoría los que regentaban bares de la Plaza Mayor y barrios de los alrededores. Los calamares son un producto muy rentable, fácil de trabajar, sin espinas y con poca merma, no tiene sabores fuertes y le gusta a casi todo el mundo, ideales para un negocio de comidas, así pues, el apogeo de la moda de este bocadillo se da ya en los años cincuentas y sesentas.

Hoy se pueden encontrar bocadillos de calamares por toda la ciudad, tanto los que están hechos con las recetas más tradicionales que se han ido heredando generación tras generación, por otro lado, tenemos las variantes más particulares y más adaptadas a las técnicas culinarias modernas, sea como sea, no puedes visitar Madrid y dejar de probar uno de estos bocadillos.

Agárrate que empezamos. Para ello debemos usar harinas especiales para frituras, entonces, usaremos harina de garbanzos, pero vamos a mezclarla a partes iguales con harina de trigo común, esto nos dará una fritura liviana, ideal para comerla en un bocadillo. Cortaremos en aros de entre 5-8 milímetros de grosor unos calamares, bien sean frescos o congelados, las dos opciones son válidas, aunque es más recomendada la primera. Usa aceite de oliva bien caliente para la fritura (no escatimes con el aceite) y poco más hay que agregar. Si sigues estos pasos, te garantizamos un Bocadillo de calamares perfecto, crujiente y tierno, nada seco y lleno de sabor. No se diga más, Manolo, marchando un bocata de calamares!

RECETA Nº 415 – BOCADILLO DE CALAMARES

Raciones: 1 bocadillo grande (2 personas o 1 músico)

Dificultad: Fácil

Preparación: 5 minutos

Tiempo de cocción: 12 minutos

Coste: Bajo

Tipo: Masas, sándwiches, pizzas y +

Familia: Sándwiches

Sub Familia: Calamares

Cocción: Freidora/sartén

INGREDIENTES

160 gr calamares limpios y cortados en anillas (patas incluidas o no, según tu gusto)

1 Pan para bocadillo (baguette, baguetina, ciabatta, campesino o el bollo de tu preferencia)

40 gr harina de garbanzo

40 gr harina de trigo

Aceite de oliva

sal

Limón o mayonesa, mayonesa con ajo o Alioi para servir (opcional)

PREPARACIÓN

1. Una vez cortados, bien escurridos y secos nuestros calamares, añadimos sal al gusto.

2. Mezclamos las dos harinas y enharinamos hasta que una capa cubra bien nuestros calamares. Es mejor hacerlo poco a poco, por tandas pequeñas, así no se nos forman pegotes.

3. Con el aceite bien caliente, es importante que esté al menos a 180-190ºC, sacudimos los calamares del exceso de harina y los vamos soltando suavemente en el aceite para freírlos, al igual que en el enharinado, aquí también es mejor freírlos por tandas para que no se enfríe el aceite y tengamos una fritura pareja.

4. 4-5 minutos serán suficiente para dorarlos, a medida que se vayan dorando, los vamos retirando sobre papel absorbente para quitar el exceso de grasa. Repetimos hasta freír todos los calamares.

5. Cortamos el pan por la mitad y rellenamos con los calamares, servimos inmediatamente acompañando con mayonesa o alioli y una cerveza bien fría.

NOTAS

Lo suyo es que le quites la piel a los calamares para meterlos en un bocadillo, pero si no quieres hacerlos, tú mismo con tu organismo, lo mismo puedes hacer con los tentáculos, si te gustas los metes, sino, los guardas para otra receta, quizás un arroz o fritos en una ensalada templada que van de perlas.

Bien sabes que en Gastronoming respetamos mucho las tradiciones culinarias y aunque este bocadillo se acompañe con unas gotitas de zumo de limón, que la verdad, le da un toque fresco alucinante, hay quienes le ponen una buena mayonesa y ya que ahora no nos lee nadie, si eres de sensaciones fuertes, intenta ponerle a tu Bocadillo de calamares un poco de Alioli y ya, si te va la marcha, métele sin miedo nuestra espectacular Mayonesa chipotle y muérete del gusto. ¿Ahora qué? A disfrutar se ha dicho, no te olvides de las cervecitas bien frías!