Y si el relleno es básico en un bocadillo, el pan, la otra parte de esta pareja, no es menos importante. Si conseguimos que esté a la altura el éxito será total. Para estos magníficos calamares de playa y después de la experiencia del Pan de hamburguesa al nero di sepia, hemos elaborado otro pan coloreado y aromatizado con tinta de calamar que ha combinado a la perfección. Publicaremos la receta la próxima semana.
Ingredientes
2 calamares medianos
1 cebolla
2 dientes de ajo
perejil
sal
aceite de oliva
pan (al gusto)
Para dos bocatas "completitos"
Preparación
Pelar y cortar la cebolla en juliana.
Colocar una sartén al fuego con dos tres cucharadas de aceite y añadir la cebolla. Sazonar y dejar pochar lentamente, removiendo de vez en cuando hasta que se ablande y coja un tono caramelo. Retirar del fuego y reservar.
Pelar y picar los ajos. Lavar y picar el perejil.
Colocar una sartén al fuego con aceite de oliva y sofreír el ajo junto al perejil con cuidado que no se quemen. Retirar del fuego y reservar.
Los calamares los podéis traer limpios y cortados de la pescadería o bien, si los tenéis enteros, lavarlos, limpiarlos y cortar los cuerpos en anillas finas. En ambos casos guardar las patas y las aletas para otras preparaciones.
Colocar una sartén antiadherente en el fuego y, con unas gotas de aceite, pasar las anillas de calamar por ambas caras, hasta que adquieran ese tono característico de calamares a la plancha.
El montaje del bocata
Abrir el pan a lo largo y disponer la base en un plato. Extender una capa de la cebolla que hemos preparado.
Colocar encima dos o tres capas de anillas de calamar.
Condimentar con el aceite de ajo y perejil.
Ya solo queda cerrar el bocadillo, colocar cerca una cervecita y saborear la gloria.
Y recordad, la próxima semana, la receta del pan.
Con esta receta participamos en el reto de La cocina typical spanish la propuesta de este mes #BocataTS.