En estas fiestas casi todo el mundo está buscando ideas nuevas para hacer canapés, y a ser posible, que sean originales. Y lo mismo me pasó a mi. Hay años que ya tengo pensado el menú para las navidades desde semanas antes, pero este año, sin darme cuenta, se me han echado las navidades encima... ¡Y yo sin saber qué poner de canapés! jajaja.
En fin, que me puse a buscar como una loca qué podía poner a mi familia estas navidades... y di con esta receta del blog Mama Papillon. La receta original era con mermelada de vino, pero no disponía ni de tiempo ni de ganas para hacer mermelada. Hacía un tiempo que tenía un bote de mermelada de pimientos y como sé que la combinación queso de cabra - mermelada de pimientos está buenísima, decidí hacerlo con la mermelada que tenía en lugar de la de vino.
Sólo deciros que volaron... jajaja. Además, se tienen que preparar con un poquito de antelación, para que el queso se vuelva a endurecer y los bombones no estén blandengues. Por lo tanto, ¡ideal para los que no tienen tiempo de preparar canapés a última hora!
Ingredientes para unos 12 bombones:
1 paquete de 200 gramos de queso rulo de cabra
30 gr. de mermelada de pimientos (pulsar en el enlace para ver la receta)
60 gr, de crocanti de almendraPreparación:
Abrimos el paquete del queso rulo de cabra. Para los que no sepáis qué es, aquí tenéis una foto:
Eliminamos con un cuchillo la corteza blanca que hay en el exterior del queso rulo de cabra.
Al final tiene que quedar sólo la parte cremosa del queso.
La partimos en trozos y los ponemos en un recipiente. Nos ayudamos de un tenedor para desmigajar el queso. Tiene que quedar algo parecido a esto:
Hemos de tener cuidado de que no se derrita demasiado, porque si no, no se podrá manejar bien. Cogemos un poquito de queso y hacemos una bolita de unos dos centímetros (o dos centímetros y medio) de diámetro.
A continuación usamos un palillo con el borde redondeado o similar y hacemos un agujero en la bolita, teniendo cuidado de que no salga el palillo por el otro lado. Vamos agrandando el agujero con cuidado de no romper la bolita.
Ponemos la mermelada en una manga pastelera con una boquilla lo suficientemente grande como para que quepa en el agujero y que no se quede taponada con algún trozo de pimiento de la mermelada. Si os va mejor, podéis triturar bien la mermelada antes de ponerla en la manga pastelera. De esa forma no se os taponará la boquilla.
Introducimos la boquilla de la manga pastelera en el agujero.
Rellenamos el agujero con la mermelada de pimientos. Hemos de tener cuidado de que la mermelada no llegue hasta arriba del todo, porque si no, después se saldría.
A continuación cogemos un trocito de queso del recipiente y tapamos el agujero con cuidado.
Volvemos a dar forma redondeada al bombón con cuidado de no apretar demasiado, porque se saldría la mermelada.
A continuación ponemos el crocanti de almendra en una tacita y ponemos la bola de queso encima. No hace falta poner todo el crocanti de golpe. Sólo pondremos un poquito. No se tiene que ver el fondo. Fijaos en la cantidad que hay en la foto.:)
Ahora movemos circularmente la tacita para que la bola de queso ruede sobre el crocanti y se vaya rebozando ella sola, sin necesidad de tocarla. De esta forma gastamos sólo el crocanti necesario. A medida que se vaya gastando el crocanti, iremos añadiendo más a la taza.
Una observación que no tiene nada que ver con esta receta: Este método también podéis usarlo para rebozar o enharinar otras cosas redondas como albóndigas. Os ahorraréis bastante en harina y pan rallado :)
Repetir el proceso con todas las bolitas de queso. Una vez estén rebozadas con el crocanti, las pondremos a refrigerar en la nevera para que se endurezca el queso. Las tendremos en la nevera hasta la hora de servir.
¡Espero que os haya gustado la receta!. Si es así, no os perdáis mis actualizaciones. Podéis seguirme haciendo click en "Me gusta" de Facebook, añadiéndome en vuestros círculos en Google +, o en Twitter.