Pero hubo un día que, cuando ya estaba metida en la faena de prepararlos, se dio cuenta de que no tenía suficiente vinagre para la conservación, así que usó limón. Mala cosa, me encantaron. Mucho mejores que sólo con vinagre, que ya me parecían un manjar.
A partir de entonces los he hecho siempre con limón. Os aseguro que están deliciosos y, si no os importa enguarraros un poco limpiando boquerones, os saldrá un marinado delicioso. Y la mar de simple en ingredientes.
Voy con la receta. Para variar, las medidas son aproximadas. No es de esas recetas en las que vayas pesando o midiendo todo. Tienes un bote de limón exprimido, una botella de vinagre y el aceite de oliva virgen extra ahí y vas haciendo. Pero bueno. Allá vamos.
Receta para 1 recipiente hermético:
- 500 gr de boquerones medianos
- zumo de 2 ó 3 limones
- vinagre de vino blanco
- sal
- 3 dientes de ajo grandes
- un manojo de perejil
Preparación:
Debemos tener en cuenta el tiempo del marinado. La receta la deberemos preparar mínimo un día antes de que la vayamos a consumir.
Así que limpiamos bien los boquerones, separando los filetes, y dejándolos en un recipiente. Los lavamos bien con agua fría y los escurrimos.
Los pondremos en un bol poniendo una capa de filetes, un poco de sal y un chorrito de vinagre. Iremos poniendo también de vez en cuando un chorrito de limón y finalmente medio vaso de agua.
Debemos procurar que queden bien cubiertos de líquido. Los dejaremos en la nevera de un día para otro hasta que veamos que han adquirido un color beige claro.
Entonces picaremos los ajos y el perejil.
Prepararemos un recipiente hermético poniendo un poco de aceite de oliva virgen extra y un poco de zumo de limón. Nuevamente iremos colocando los filetes de boquerón alternando capas de filetes, un poco del ajo picado, un poco del perejil, un chorrito de limón y un chorrito de aceite de oliva. Haremos esto hasta haber colocado todos los filetes. Rellenaremos con aceite y limón hasta cubrir los filetes si no lo habíamos hecho ya.
Y ya está. De aquí a la nevera, y de la nevera al plato junto con unas tostaditas.
Un placer rico rico :)
¡Que aproveche!