En esos días, quieres llegar a casa y no cocinar. Lo ideal sería tener la comida hecha y poder sentarse en el sofá relajadamente. A lo mejor tienes suerte y alguien te la ha preparado o también puedes optar por dejarla hecha del día anterior.
Si comes en el trabajo o no dispones de mucho tiempo, la mejor opción es hacer la comida de un día para otro.
Pues bien, la receta de hoy es perfecta para eso. Simplemente necesitamos cocer el brócoli el día/noche anterior y el resto es "pan comido".
Ingredientes:
Brócoli
Tomates cherry
Cebolla
Jamón
Queso
Sal y pimienta
Albahaca
Preparación:
1- Cocemos el brócoli, lo escurrimos y lo ponemos en una bandeja apta para el horno. (Si preferís, podéis tenerlo ya cocido con anterioridad).
2- Troceamos la cebolla y el jamón (yo utilicé un trozo de jamón asado que tenía del día anterior) y lo echamos junto con el brocoli.
3- A continuación, cortamos en rodajas los tomates y también los ponemos en la bandeja. Añadimos sal, pimienta y albahaca al gusto.
4- Rallamos un poco de queso y lo ponemos por encima. Elegid el queso que más os apetezca.
5- Con el horno ya precalentado a 180ºC, metemos la bandeja durante aproximadamente 15 minutos. La retiramos cuando el queso empiece a estar tostadito.
Queso manchego aquí?? Imposible de encontrar.
Yo tengo la gran suerte de tener una cuña en casa (alabadas sean las visitas). Como si de una gran joya se tratase, lo "uso" para ocasiones especiales (al final se me va a poner malo y todo).
En fin, este brócoli merecía estar coronado por un gran queso. Rallé un poco, un poquito más, ya que "no era suficiente", y al horno.
Ya os imagináis el resultado. Buenísmio no, lo siguiente. Si es que este queso, a donde va triunfa.
Ya veis que este plato es contundente y rápido de hacer. Mientras está en el horno podéis sentaros y relajaros. Pero no os pongáis muy cómodos, no vaya a ser que os quedéis dormidos.
A ser felices!
Un beso,
Ana