uno para celiacos (receta básica que podéis hacer para todo el mundo, realmente). Incluso os traje una receta de su primo lejano, el blondie, que es "blanquito" en vez de "morenito". Recetas básicas y fáciles de hacer en casa y que siempre triunfan. Por eso, una vez más, me he animado con una nueva receta de brownie.
Esta vez os traigo una que ya habréis visto mil veces: con Oreo. Estas galletas son mi perdición. ¡Me encantan! Soy de los que empiezo a comerlas y no puedo parar. Si alguna vez me veis con los labios y dientes negros e inconsciente no creo que sea porque me han pegado una paliza... sino porque me he pegado un atracón de Oreo. Tengo prohibido comprarlas, a no ser que sea para un postre. Pero alguna me acabo comiendo sola.
Ya dejo de hablar y os dejo con la receta. ¡Espero que la disfrutéis!
Brownie de Oreo
Dificultad: Fácil
Tiempo horneado: 35-40 mins (aprox)
Raciones: 10
Etiqueta: Postre
Trotamundos: EEUU y Canadá
Para el brownie
120 gr de chocolate negro
180 gr de mantequilla
4 huevos
100 gr de azúcar moreno
80 gr de azúcar blanco
Una pizca de sal
Una cucharadita de vainilla en pasta
60 gr de harina
Un paquete de galletas oreo
Para decorar
180 gr de azúcar glacé
Unas cucharadas de leche
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- Derretimos el chocolate con la mantequilla al baño maría. Cuidado, ¡que no se queme!
- En un bol mezclamos bien los huevos con los dos tipos de azúcar y la sal.
- Añadimos la harina tamizada y mezclamos bien.
- Añadimos la vainilla en pasta y seguimos batiendo.
- Echamos la mezcla de chocolate y mantequilla y mezclamos todo bien hasta obtener una masa homogénea.
- Añadimos un puñado de oreos partidas en trozos pequeños.
- Engrasamos bien un molde. Yo he utilizado uno redondo pero podéis usar uno cuadrado o rectangular.
- Añadimos la mezcla y echamos encima galletas oreo partidas por la mitad.
- Horneamos durante 30 minutos aproximadamente, hasta que al pinchar con un palillo este sale limpio.
- Dejamos enfriar sobre una rejilla.
- Prepararemos ahora el glaseado. Para ello mezclamos el azúcar glacé con dos o tres cucharadas de leche. Si vemos que no está muy líquido, añadimos alguna más. Tampoco hay que pasarse.
- Lo añadimos con una cuchara por encima del brownie cuando este esté un pelín frío.
- Cortamos en cuadrados y servimos en frío.
¡A disfrutar!
Fuente: este post proviene de Jaleo en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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