En España son muy populares y se elaboran con bacalao desalado y desmigado. Son ideales para degustar como tapa y aunque los encontramos congelados en muchos supermercados, la verdad es que no son comparables a los caseros.
El bacalao es un de los pescados más utilizados en la cocina. Es muy habitual cocinarlo en guisos. La combinación de este pescado con el ajo en una masa inflada y frita es una experiencia exquisita en el paladar. Además es una manera fantástica de introducir el pescado en los niños.
Es una de las recetas más tradicionales que menos cambios ha sufrido con el paso de los años, manteniendo la esencia de nuestras abuelas. Es una receta muy tradicional de comer en Pascua y es que el bacalao en Semana Santa forma parte importante de la cocina mediterránea desde hace muchos años.
La receta que os traigo hoy es de lo más sencilla. Existen otras variantes que aportarán mucha más esponjosidad a los buñuelos. Pero con esta receta ahorrarás tiempo y el resultado es muy bueno también.
¡Recién hechos son toda una delicia!
Ingredientes
200 gr. bacalao desalado
130 gr. harina
150 ml. agua
2 dientes de ajo
1 puñado de perejil fresco picado
1 huevo y 1 yema
1/2 cucharadita de bicarbonato o levadura en polvo
Sal al gusto y Aceite para freír
Picamos el ajo, el perejil y el bacalao.
En un bol mezclamos la harina con la levadura o bicarbonato. Le añadimos el agua y mezclamos.
Agregamos los huevos y la sal. Mezclamos bien, hasta que no haya grumos.
Añadimos a la mezcla la picada de bacalao, ajo y perejil.
Calentamos aceite en una olla o sartén grande. Debe haber abundante aceite para que puedan flotar y sitio para que se hinchen.
Con la ayuda de dos cucharas vamos friendo porciones.
Cuando estén doraditos retiramos y escurrimos en papel absorbente.
Podemos acompañarlos con alguna salsa de tomate, mayonesa... O con un chorrito de miel de caña, una combinación que sorprende.
¡Los servimos calentitos y seguro que no durarán mucho en el plato!
Si queremos que tenga un color más amarillento, podemos añadir a la masa una pizca de cúrcuma.
Si queremos darle más sabor, podemos añadir 1 cebolleta picada a la masa.
Podemos sustituir el agua por leche o cerveza si queremos darle un toque diferente.
Podemos elaborarla con otro pescado, siguiendo los mismos pasos: salmón, gambas, merluza...
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