Aunque se puede hacer con cualquier tipo carne, es recomendable hacerla con carne con hueso, yo la he hecho con pollo y con conejo y queda también exquisito.
El secreto de esta receta no es el ingrediente, que es el coñac o brandy, sino el momento de añadirlo a la elaboración. En realidad se podría decir que la carne queda frita en coñac. Además hecho con UNICO resulta un plato muy sano, ya que se cocina a baja temperatura evitando la saturación de las grasas y la aparición de tóxicos como la acrilamida, lo que hace que se digiera muy bien y siente de maravilla.
Ingredientes
1K de chuletas de cordero de palo y lomo
6 dientes de ajo
100 gr de almendra cruda
3 hojas de laurel
250 ml de coñac o brandy
Sal y pimienta
Preparación
En un procesador de alimentos, picadora o thermomix, picar los ajos pelados y las almendras y reservar
Poner las chuletas de cordero salpimentadas y las hojas de laurel en una olla o cazuela antiadherente con la mitad del coñac tapada con UNICO en modo húmedo y freír a fuego fuerte unos 8 minutos por cada lado hasta que se haya evaporado el coñac y cojan un color dorado. En el caso de hacer esta receta con pollo, conejo u otro tipo de carne menos grasa, habría que poner un poco de aceite con el coñac, pero al cordero, como ya tiene su propia grasa yo nunca le añado aceite.
Cuando las chuletas estén bien fritas bajar el fuego y añadir la picada de almendras y ajo, remover, tapar con UNICO y mantener a fuego suave dos o tres minutos para que no quemen los ajos y tomen color las almendras.
Añadir el resto del coñac y mantener a fuego suave hasta que se haya reducido.
Dejar reposar con la olla tapada un par de minutos y servir bien caliente con la guarnición que se prefiera, patatas fritas, verduras, ensalada, etc.