El cordero es la carne que mas consumimos en casa, si conocéis mi blog lo veréis porque tengo muchísimas recetas con cordero, por eso cuando las vi en su blog me fui al congelador y saqué un paquetito de chuletas para ponerme con la que sería mi segunda receta, y ya puesto os cuento algo sobre el cordero, yo suelo comprar el cordero joven. El lechal asado ha sido considerado un manjar desde la antigüedad, que se convirtió en moneda de cambio. La parte mas codiciada del cordero es la pierna, aunque no para mí que prefiero las chuletas, la casquería y algunas partes de tercera categoría como el cuello y el pecho, que son excelentes para guisos y estofados.
Ingredientes:
12 chuletas (costillas, palos) de cordero (añojo)
150gr de jamón
100 gr de cebollas
300 gr de tomates maduros
200 gr de chorizo de pamplona (chorizo colorado)
1/2 decilitro de aceite
una pizca de azúcar
sal
Preparación:
Ponemos a calentar el aceite en una sartén. Cuando esté caliente salteamos las chuletas sazonadas con sal.
Pasamos las chuletas a una cazuela de barro. En la grasa que ha quedado en la sartén rehogamos la cebolla picada y el jamón cortado a lonchas. Cuando la cebolla empieza a dorarse, añadimos el tomate pelado, sin semillas y picado.
Reducimos a fuego lento hasta que el tomate haya perdido el agua y sazonamos con sal y azúcar.
Cuando la salsa está en su punto, vertemos encima las chuletas. En ese momento, colocamos encima unas rodajas muy finas de chorizo y las ponemos a gratinar a fuego vivo durante unos segundos con el fin de que el chorizo se funda un poco sobre el tomate.