Y como no podía ser de otra manera, teníamos que terminar a lo grande. Nuestro objetivo era robarle una deliciosa receta a la maestra de todos los asaltadores, la que ha sabido robar con más maestría y quedar en primer lugar... "casi ná" ¿verdad? Cuando lo vi hasta me temblaron las piernecillas de las medidas de seguridad que nos podríamos encontrar... Que fueron muchas, no voy a negároslo, pero como veis conseguimos superarlas todas.
Por que pese a ser la más fuerte, yo creo que Elvira dejó algún que otro huequillo para que nos coláramos en su cocina, Así se come en Granada. Si no no entiendo cómo pude llevarme esta rica receta con todo el descaro. Bueno, esta y unas cuantas más, por que tiene un montón de recetas y todas ellas riquísimas ¡no os las podéis perder!
Así que después de dar unas cuantas vueltas y cotillear algún que otro armario dimos con estos rollos de canela. ¡No nos lo podíamos creer! Era una de nuestras recetas pendientes que siempre, por una cosa o por otra, acabábamos por dejarla para más adelante... ¡y ya no teníamos excusa! Además, este fin de semana por aquí ha "refrescado" algún grado, así que encender el horno no parecía un suplicio tan grande como en otros días más calurosos... (ejem... esto es parte de nuestro autoconvencimiento...)
En fin, que estos rollos de canela nos han gustado aún más de lo que nos habíamos imaginado. Su aroma mientras lo preparas y horneas es espectacular y su sabor especiado... ¡uff, te transporta al séptimo cielo! Eso sí, es un poquito denso, no sabemos si por que me pasé un poco con la cocción o por la masa que elegí, que modifiqué un poco la receta de Elvira y seguí las indicaciones de mi Jamie y sus Swedish Sexy Bun (con ese nombre cualquier le dice que no... jeje).
Elvira, ha sido todo un placer robarte y descubrir deliciosas recetas ¡enhorabuena por ser la ganadora!
Ingredientes
2 huevos medianos
1 pizca de sal
200 gr. de azúcar blanca
50 gr. de mantequilla sin sal + un poco más para hornear
820 gr. de harina (aprox.) + un poco más para espolvorear
375 ml. de leche
7 gr. de levadura fresca
20 semillas de cardamomo o 1 cucharada pequeña de cardamomo molido
1 cucharada de azúcar moreno Ingredientes para el relleno
200 gr. de azúcar moreno
4 cucharadas soperas de canela en polvo
20 gr. de mantequilla
1 huevo Preparación
Calienta un poco la leche, añade la levadura fresca desmigada y remueve para que acabe de deshacerse. Reserva.
Si tienes las semillas de cardamomo, muélelas en un mortero y reserva.
Bate bien los dos huevos con una pizca de sal. Añade el cardamomo molido y el azúcar blanco y bate para que se mezcle todo bien.
Derrite 50 gr. de mantequilla sin sal en el microondas (con 30 seg. será suficiente), añádela a la masa y mezcla.
Continúa añadiendo la leche con la levadura, remueve y añade la harina poco a poco. No eches toda la cantidad de golpe ya que según vaya la masa admitirá más o menos cantidad de harina. Una vez amasada, tienes que conseguir una masa uniforme, con un toque pegajoso, pero que no se quede enganchada en los dedos.
Tapa el bol con un trapo y déjala reposar 1 hora aproximádamente, hasta que doble su tamaño. Pasado este tiempo, enharina la superficie donde vayas a trabajar y estira la masa con la ayuda de un rodillo hasta conseguir un rectángulo.
Para el relleno, derrite 20 gr. de mantequilla en el microondas y, con la ayuda de un pincel, cubre toda la superficie de la masa.
En un bol mezcla el azúcar moreno con la canela y espárcelo por toda la superficie, apretando un poco para que se pegue bien a la masa y el relleno no se caiga.
Ya solo nos queda hacer un rollo con la masa....
Y cortarlo en rodajas más o menos anchas según lo grandes que los quieras. Yo las hice de unos 3 - 4 cm.
Si quieres que la parte de abajo también tenga un toque tostado, sobre el papel vegetal para hornear coloca unas pizcas de mantequilla y un poco de azúcar moreno. Coloca los rollitos encima y deja que reposen tapados unos 30 minutos, verás como aumentan su tamaño.
Pon a precalentar el horno a 180 ºC, calor arriba y abajo. Si quieres, puedes pintarlos con un huevo batido o un poco de leche para que se doren más fácilmente.
Hornea los rollitos durante 30 minutos aproximádamente, hasta que la superficie esté bien dorada.
Deja reposar para que se enfríen, si puedes... ¡y a disfrutar!