Pues la idea de hoy los típicos cinnamon rolls o rollos de canela, pero le traigo con un toque más de sabor que ya no son sólo con canela ya que les he espciado un poco. Me encanta el sabor del jengibre y la nuez moscada, y creo que con la canela le va estupendamente.
De hecho cuando les preparé han durado en casa un suspiro así que no puedo decir cuanto se ponen duras porque no nos ha dado tiempo ya que en un par de días ya no teníamos. Bueno os dejo con la receta y a disfrutarlos para desayuno, merienda, hora del café... o un porque sí.
INGREDIENTES (9 unidades):
1 bote de masa de croissant de Lidl
4 cdas de azúcar moreno
2 ctas de canela
1/4 cta jengibre en polvo
1/8 cta cardamomo en polvo
1/8 cta nuez moscada en polvo
100 gr mantequilla
4 cdas azúcar glass
2 cdas de leche
PREPARACIÓN:
Preparamos en un cuenco la mezcla del relleno con el azúcar, canela, jengibre, cardamomo y nuez moscada. A parte ablandamos a punto pomada la mantequilla y reservamos.
Abrimos el bote de masa y con cuidado la desenrollamos sobre una superficie lisa y limpia. Como viene precortada para los croissants pinzamos para juntarlas. Una vez extirada la masa pincelamos con la mantequilla, después espolvoreamos la mezcla de azúcar y especias por toda la superficie. Y con cuidado volvemos a enrollar.
Cortamos discos de 1 dedo de grosor y vamos colocando en una molde o bandeja previamente engrasada, tenemos la precaución de los cierres que queden juntos para que no se abran los rollo.
Si ha quedado un poco de mantequilla untamos las superficies e introducimos en el horno precalentado a 180ºC durante unos 18 minutos.
Preparamos el baño o glaseado, para ello en un cuenco mezclamos el azúcar y la leche. Cuando saquemos los rollos del hornos hacemos tiras, lo que le dará un brillo.
Ya he realizado el sorteo del Kit de gofre Lékué, para ver el resultado aquí