Un mes más nos enfrentamos a un nuevo desafío, y la verdad, yo después del desafío de los macarons no pensaba que nos lo podían poner más difícil, por lo menos para mí, ya que es la primera vez que he hecho pasta fresca, y cada vez que leía un comentario en facebook de que si la he puesto a secar, si la he tirado a la basura, se me ponían los pelos de punta.
No iba a participar, porque tengo un brazo un poco fastidiado, pero al final no me he podido resistir y con ayuda para estirarla con el rodillo, al final ha salido.
Queridas Boss, me gusta tanto vuestro reto que me es imposible no participar. Espero estar a la altura.
Ingredientes para dos personas:
Pasta fresca:
2 huevos
200 gr de harina
una cucharada de agua templada
Preparación:
Hacemos un volcán con la harina tamizada y en el centro ponemos los huevos y la cucharada de agua, batimos con un tenedor, poco a poco vamos mezclando la harina hasta que se haya absorbido.
Vaciamos en la encimera y vamos amasando suavemente haciéndola rodar hasta que la masa esté lisa. Formamos una bola y la dejamos reposar al menos 30 minutos.
Estirar la masa entre dos papeles enharinados y dejarla muy fina con la ayuda del rodillo. La enrollamos y vamos cortando espirales de 1/2 centímetro de grosor. Las colgamos y las dejamos secar mientras preparamos la salsa.
Salsa de limón:
20 gr de mantequilla
200 mililitros de nata (crema de leche) fresca
la piel rallada de un limón
el zumo de medio limón
2 cucharadas de queso parmesano rallado
sal y pimienta blanca.
Preparación:
En una sartén ponemos la mantequilla y la nata (crema de leche), esperamos a que hierva, añadimos sal, pimienta, la ralladura y el zumo de limón y cocemos durante 3 minutos y reservamos.
Cocemos la pasta en agua hirviendo con sal durante 3 minutos. La escurrimos y pasamos por agua fría y cuando esté bien escurrida, la mezclamos con la salsa, espolvoreamos el queso palmesano por encima y metemos al horno, solo con el grill, a 180 grados durante 10-15 minutos.
Para ver el resto de recetas participantes en este reto, entra aquí.
Fuente: este post proviene de La cocina de Catina, donde puedes consultar el contenido original.
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