No soy muy fan de la coca de llanda ni de ningún bizcocho, lo reconozco, pero cuando probé la que hace mi cuñada Juli, cambié de opinión y tuve que pedirle la receta. Es muy jugosa y hasta adictiva, el hecho de que lleve nueces la hace todavía más rica. Ella la espolvorea con una mezcla de azúcar y canela, pero en casa no gusta la canela, así que ese paso me lo salté, aunque la próxima le pondré el azúcar. En el horno carameliza y queda un crujiente muy rico.
Las medidas son en vasos (de 25 cl.), que facilita mucho el trabajo, aunque la harina son 250 g. los pesé y vienen a ser dos vasos.
-2 huevos
-un vaso de azúcar
-un vaso de aceite
-un vaso de leche
-2 vasos de harina (250 g.)
-2 sobres de levadura
-ralladura de limón
-2 cucharadas de mermelada
-nueces peladas
-una tacita de azúcar y canela
Mezclamos los ingredientes uno a uno por ese orden, menos las nueces y la mezcla de canela y azúcar.
En un molde un poco alto forrado con papel vegetal. repartimos la masa y hundimos en ella las nueces. Poner cantidad porque luego la masa crece y para mi gusto puse pocas.
Espolvoreamos con la mezcla de canela y azúcar.
Metemos en el horno precalentado a 180ºC durante 20 minutos o hasta que al pinchar con el cuchillo salga limpio.
Sacamos del horno y dejamos enfriar. Se desmolda fácilmente con el papel una vez frío.
Bon profit!
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