A lo que no pienso renunciar es a mi ración semanal de dulce, y aunque no llegó a tiempo para San Juan, aquí está mi coca de este año. La hice ayer y casi no queda... ¡qué rica!
La masa es tipo brioche, igual que la que hice para la coca del año pasado, pero esta vez lleva por encima crema pastelera además de piñones y cerezas. Tenía ganas de probar esta versión que tanto se hace en otras partes de España y que guarda muchas similitudes con nuestra larpeira gallega. La verdad es que ambos dulces están buenísimos, merece la pena probarlos... De momento, vamos con la receta de la coca y más adelante os dejaré la de la larpeira.
INGREDIENTES
Para la masa:
520 gr de harina de fuerza
150 ml de leche
100 gr de manteca
100 gr de azúcar
2 huevos
25 gr de levadura prensada
ralladura de 1/2 limón
ralladura de 1/2 naranja
Para la crema pastelera:
350 ml de leche
2 yemas de huevo
85 gr de azúcar
1 cucharada de maizena
1 ramita de canela
piel de 1/2 limón
piel de 1/2 naranja
Para la decoración:
1 huevo batido
cerezas escarchadas o en almíbar
piñones (35 gr aprox)
azúcar para espolvorear
ELABORACIÓN:
1. Empezamos haciendo la masa de la coca. Sobre la superficie de trabajo o en un bol grande pon la harina en forma de volcán, es decir, a modo de montaña con un hueco en medio. En el centro, añade la levadura y la manteca en trocitos. Templa ligeramente la leche y agrega la mitad. Remueve para que los ingredientes vayan integrándose. Continúa incorporando los huevos, las ralladuras, el azúcar y el resto de la leche. Mezcla con ayuda de una cuchara, y cuando la masa comience a tener consistencia trabájala con las manos hasta que resulte elástica y homogénea. Si consideras que está pegajosa añade un poco más de harina.
2. Pon la masa sobre una superficie espolvoreada con harina y tápala con un paño limpio. Deja que fermente hasta que prácticamente doble su tamaño. Tardará sobre una hora, aunque depende de la temperatura ambiente del momento.
3. Mientras, vamos a preparar la crema pastelera. Separa medio vaso de leche y pon el resto a calentar con la piel de naranja, la de limón y la canela. Cuando hierva retira del fuego y deja en infusión. Una vez frío, quita la canela y las pieles. Mezcla el azúcar con las yemas, añádelo y remueve. Lleva otra vez al fuego y cuando comience a calentar agrega la maizena desleída en el vaso de leche. Remueve constantemente hasta que la crema espese y retira del fuego. Reserva.
4. Pasado el tiempo de fermentación, tendremos que amasar de nuevo para desgasificar. Seguidamente, estira la masa con forma ovalada sobre una lámina de papel de vegetal, dándole 1,5 cm de grosor. Deja que fermente de nuevo hasta que duplique su volumen.
5. Precalienta el horno a 180º con ventilador.
6. Pasa la masa a la placa del horno, sin quitar el papel vegetal. Píntala con el huevo batido. Con un pedacito de cuerda marca pequeñas hendiduras en la masa formando líneas cruzadas en diagonal. Pon la crema pastelera en una manga con boquilla lisa o en forma de estrella y rellena las hendiduras. Decora con las cerezas cortadas a la mitad y con piñones. Espolvorea un poco de azúcar y lleva al horno durante 20 o 25 minutos. Retira del horno cuando la masa esté doradita y deja enfriar.
¡Buen provecho!
Nos vemos en la siguiente publicación, mientras podéis encontrarme en mi página de Facebook , en Google +, Pinterest e Instagram.