Esta es mi coca masegada, que según wikipedia significa "coca magullada".
Andorra es un país situado entre España y Francia, su idioma es el catalán y su capital, Andorra la Vella. Según Duriart de Viaja en mi cocina, su gastronomía tiene muchas tradiciones similares a las comarcas catalanas pirenaicas y tiene una cocina estacional basada en la caza, pesca, setas y frutos silvestres.La coca es un dulce típico de esta región como explico en esta receta y encontré esta versión de coca masegada que hice a mi manera...además le agregué albaricoques (damascos) secos, que en realidad debían ser melocotones (duraznos), porque le pedí a Héctor que los comprara y es lo que consiguió, jijijijiji..
Ingredientes
Para el prefermento:
100 gr. de leche
100 gr. de harina común
15 gr. de levadura fresca
Preparación:
Desmenuzamos la levadura en leche templada y lo mezclamos con la harina, integrando bien, cubrimos con papel film o plástico y dejamos descansar durante 40 minutos.
Para la coca:
325 gr. de harina común
125 gr. de azúcar
5 gr. de sal
ralladura de 1 naranja
25 gr. de leche
2 huevos grandes
60 gr. de mantequilla blanda
15 orejones de albaricoque
Huevo batido para pintar la masa
1 cucharada de azúcar para espolvorear
Preparación:
Colocamos en un bol la harina, el azúcar y la sal, mezclamos bien y añadimos la ralladura de naranja, los huevos batidos y la leche templada. por último agregamos el prefermento y mezclamos. Volcamos la mezcla en la encimera y unimos bien.
Obtenemos una masa un poco pegajosa. Le agregamos la mantequilla blanda e incorporamos bien, amasando hasta obtener una masa suave que no se pega a los dedos. Si es necesario añadimos un poco de harina en el encimera (mesada) pero lo suficiente para que la masa quede suave. Ponemos harina en un bol y colocamos allí la masa, la cubrimos con papel film y dejamos descansar 45 minutos. Pasado ese tiempo volcamos la masa en la encimera y la aplastamos para quitar el gas que se forma con la fermentación.
En un cuenco con agua dejamos hidratar los orejones durante 20 minutos.
Ponemos la masa sobre papel vegetal (para horno) en una bandeja para horno y estiramos con los dedos dándole forma rectangular. Colocamos por encima los orejones y dejamos descansar 25 minutos.
Precalentamos el horno a 220º.
Pintamos la masa con huevo batido y esparcimos azúcar por encima y cocinamos en horno a 200º durante 5 minutos. Bajamos la temperatura a 180º y cocinamos 15 minutos más o hasta que esté dorada por encima.
Retiramos del horno y dejamos enfriar.
Quedó buenísima, esponjosa por dentro y crujiente por fuera, mmm...
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¡Hasta la próxima!
¡Sean felices!
Fuente: este post proviene de Mi mundo Pinkcake, donde puedes consultar el contenido original.
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