Parece que ahora está de moda ir siempre que salimos o organizamos una cena con una copita en la mano. Feo, feo. Pero si preparamos nosotros mismos un cóctel sin alcochol… ¡mucho mejor!
El alcohol y la diabetes
Antes de nada, vamos a aclarar algo, por si alguien tiene dudas: los diabéticos no deben consumir alcohol. Sin excepción, hay quien dirá que con moderación, pero yo os diría directamente que el alcohol fuera. Para que os hagáis una idea, nuestra nutricionista nos dio un folleto-semáforo con alimentos prohibidos, de consumo moderado y recomendado, y el alcohol está en el rojo: prohibido.
El alcohol contiene azúcares, y eso hace que los niveles de glucosa en sangre suban. Consumir alcohol teniendo diabetes, incluso de manera moderada, puede hacer que tengamos más posibilidades de sufrir una hipoglucemia, sobre todo si no hemos comido nada antes.
Además, el alcohol tiene muchas calorías y está totalmente contraindicado para dietas de pérdida de peso. Teniendo en cuenta que la diabetes puede tener relación con obesidad o problemas de peso y/o metabolismo lento, en estos casos es especialmente malo.
A veces, sobre todo en la adolescencia, se asocia el hecho de relacionarse con otras personas en ambientes festivos o celebraciones con tener que tomar alcohol. Es muy importante educar a nuestros hijos con diabetes para que entiendan que pueden salir perfectamente pero que tomar alcohol es muy perjudicial para su salud. Se debe tratar con normalidad, haciendo saber a los amigos de nuestro hijo que no debe tomar alcohol por la diabetes, y también qué hacer en caso de hipoglucemia. Es algo totalmente normal, y en todos los bares y demás locales de fiesta donde se sirven cócteles también sirven cócteles sin alcohol
De todas formas, si tomamos alcohol tiene que ser en poca cantidad, en tragos pequeños para que nos dure más, y habiendo comido algo antes, nunca con el estómago vacío. Las bebidas alcohólicas “menos malas” (no pienso decir mejores porque ya sabéis qué opino: mi recomendación es no tomar alcohol) son el vino y las cervezas light, ya que tienen menos azúcares que otros alcoholes como los licores y digestivos. Y si tomamos algo de alcohol, deberemos tener siempre a mano un poco de agua u otra bebida sin alcohol para mantenernos hidratados.
Los cócteles sin alcohol
Los cócteles son bebidas refrescantes, normalmente a base de zumo de frutas mezclados con alcohol, que suelen gustar a todos por la enorme variedad que hay. Siempre encontraremos uno que nos guste, ya que las combinaciones son prácticamente infinitas.
Lo malo de los cócteles convencionales es que:
Llevan alcohol
Casi siempre llevan azúcar
Nosotros hoy veremos cómo hacer cócteles sin alcohol y sin azúcar aptos para diabéticos. Quedan igual de ricos o más, y todos podremos disfrutar de ellos en todas las ocasiones especiales
Además, si estás a dieta para perder peso o te gusta cuidarte, sabrás que el alcohol hace que engordemos más fácilmente, y por eso también te será muy útil el poder prepararte un cóctel sin alcohol.
Para prepararlos, podéis usar una coctelera o bien un recipiente grande (el vaso de la batidora, por ejemplo) e ir removiendo con una cuchara para mezclar los ingredientes. Son muy fáciles de preparar y cualquiera los puede hacer en casa.
1. San Francisco sin alcohol
El cóctel San Francisco es sin duda mi favorito por lo agradable y dulce que resulta la combinación de zumos que usaremos. De hecho, yo muchas veces que salgo me lo pido sin alcohol, más sano, y es el que se suele pedir “el que conduce” Se sirve en copa de bola, es elegante e imprescindible para acabar una velada romántica. Se mezcla todo de golpe en coctelera o recipiente, aunque a mí me gusta servirlo sin mezclar para ver los distintos colores, y luego mezclarlo con una pajita al tomarlo.
30ml de zumo de naranja
30ml de zumo de melocotón/durazno
15ml de zumo de piña
Un chorrito de zumo de granada o grosella
2. Piña Colada sin alcohol
La piña colada es el cóctel rey del verano, ¡indiscutiblemente! Su sabor a coco y piña es ya tan famoso que se ha adaptado de mil maneras distintas (hasta nosotros hicimos una tarta mousse de piña colada). Se puede servir en vaso grande o vaso de tubo, lleno de hielo. Se mezclan todos los ingredientes y se sirve.
15ml de leche
15ml de leche o crema de coco
50ml de zumo de piña
3. Mojito sin alcohol
Y si hay un rey de la fiesta, ése es el mojito. Muy refrescante y con un sabor muy peculiar gracias a la lima y la menta. Se sirve en vaso grande, con hielo picado o de estos cubitos pequeños (yo no tenía y lo he picado en la picadora eléctrica). Primero se exprime la lima y se maja con las hojas de menta enteras, y se pone la pasta en el fondo del vaso. Echamos el hielo, y vertemos encima el zumo de limón y la soda/gaseosa.
10ml de zumo de lima
10ml de zumo de limón
50ml de soda/gaseosa (sin azúcar obviamente)
8 hojas enteras de menta
Truco: para que la menta deje ir todo su sabor, pon las hojas sobre una mano y da una palmada encima con la otra.
4. Margarita sin alcohol
El cóctel Margarita original lleva tequila, pero nosotros lo adaptamos para hacerlo sin alcohol con más zumos. Ideal para los más intensos: el resultado es una explosión cítrica súper refrescante. Si te gusta la acidez de los cítricos y eres valiente, no le pongas edulcorante. Si no, añade un poquito Se sirve en copa de cóctel pequeña, de martini, muy frío y sin hielo. Se mezclan los ingredientes y se sirven.
45ml de zumo de naranja
15ml de zumo de limón
Una pizca de sal
Edulcorante al gusto (stevia, opcional)
Ingredientes:
Instrucciones:
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