¡Muy buenas! Hoy vuelvo a publicar junto a mis compis del reto Bardají. Esta vez vamos a ver una receta de cómo hacer pan de molde casero.
Este reto lo comenzamos a principios de año con la idea de dar a conocer el estupendo recetario de Teodoro Bardají. Sus recetas han sido una grata sorpresa para mí, salen genial, y muy ricas. Por si no te convences, te invito a ver las croquetas de bacalao, el bocata de calamares, o las cocots de Valencia entre otras.
Preparar pan de molde en casa es más fácil de lo que puedas pensar, y además mucho más sano. Es increíble la cantidad de aditivos que pueden llevar algunos de los comerciales. La conservación no es ni parecida, el que hagas en casa no te va a durar un mes tierno, esponjoso y blanco níveo. Le saldrá moho en unos días y se irá poniendo duro y seco, como es normal. Créeme si te digo que no le dará tiempo, te lo comerás antes ;)
Bueno, pues vamos al lío, vamos a ver cómo hacer pan de molde en casa.
Necesitarás:
INGREDIENTES
– 500 gramos de harina de fuerza
– 150 gramos de leche
– 150 gramos de agua
– 20 gramos de levadura fresca de panadero
– 10 gramos de sal
– una cucharadita de postre de azúcar
ELABORACIÓN
Disuelve la levadura en 50 gramos de leche templada.
Añade 125 gramos de harina, y forma una bola. Quedará muy seca, añade un poquito de agua hasta que esté manejable.
Deja que repose un rato, verás que fermentará y aumentará mucho su volumen.
Entonces, añade el resto de la leche y el agua ligeramente templados. También el resto de la harina, y la sal y el azúcar.
Amasa hasta que tengas una masa elástica. Deja que fermente en un bol amplio tapada con film. Una vez haya aumentado bastante su volumen, el doble más o menos, continúa con la receta. Calcula entre 1-2 horas en función del calor que haya en tu cocina.
Enharina un molde de tipo plumcake.
Si quieres que te quede partido a la mitad como el mío, tienes que dividir la masa en dos porciones iguales. Forma dos bolas con harina en la superficie, y colócalas en el molde.
Si lo quieres de la forma tradicional, estira un poquito la masa y repliega los laterales, después enrolla tu masa como si formaras una salchicha. Enharina la superficie y coloca en tu molde.
En ambos casos, cubre con film y deja que vuelva a fermentar. Otra vez duplicará su tamaño.
Hornea a 200 grados durante 25-30 minutos. Si se dora mucho la superficie, coloca una bandeja por encima para que haga de pantalla y no coja tanto color.
Desmolda en cuanto puedas, ¡sin abrasarte!
Deja que se enfríe sobre una rejilla, y ¡disfruta!
Ideas para utilizar este delicioso pan de molde no creo que te hagan falta, desde un sandwich, tostadas para desayunar, un montadito…
Antes de despedirme, te dejo enlace directo al resto de cocinas de mis compis de reto. ¿Qué habrán preparado hoy? Venga, vamos a visitar a Maria Pilar, a Susana, a Beatriz, a Marisa, y a Paula
que me muero de ganas de verlo.
Por mi parte, nada más por hoy, ya sabes que te espero el domingo con un desayuno rico rico ;)
¡Buen provecho!
Fuente: este post proviene de Pintando las nubes, donde puedes consultar el contenido original.
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