Cuando se me mete algo en la cabeza soy un peligro.
Porque tengo un defecto y es que cuando quiero algo, lo quiero ya, y si tardo mucho en conseguirlo ya pierde interés para mi.
Esto es aplicable a muchos campos, hoy en concreto se aplica a la cocina, y es que queria hacer un postre que necesitaba de mermelada o compota y no tenía en casa.
Domingo por la mañana, todo cerrado y yo con la idea metida en la cabeza...¿Que hago?
Pues nada, a tirar de unos arándanos que tenía en el congelador y hacer esta compota de arándanos para el postre dichoso (que ya os enseñaré).
La he llamado compota express porque se tarda nada en hacerla. No es una compota al uso, es para un uso inmediato, ya que no lleva mucha azúcar y por lo tanto no se puede conservar mucho tiempo. Dos o tres días a lo sumo. Yo la he gastado en una sola tarde.
Este tipo de recetas vienen muy bien para platos dulces y salados. Los arándanos combinan perfectamente con platos de carne, con quesos, etc...
INGREDIENTES:
250 gr de arándanos frescos o congelados (si son congelados los dejamos descongelar un poco)
50 gr de azúcar (podéis poner más si queréis, a mi con esta cantidad quedó a mi gusto)
50 gr de agua
PREPARACIÓN:
Lavamos y secamos los arándanos y los ponemos en un cazo con el agua y el azúcar. A fuego medio dejamos que se vaya haciendo la compota machacando de vez en cuando los arándanos. Cuando hayan pasado unos 15 minutos y el agua se haya consumido, veremos que la preparación ya tiene una consistencia espesa. Lista.
Yo no la he triturado, he dejado los trocitos de arándanos para darle textura, así quedan mejor, pero podéis triturar con la batidora.
Yo he hecho poca cantidad, la justa para lo que tenía planeado, y me ha sobrado una poquita que me he tomado con unas tostadas. espero que os guste.
Ponemos los arándanos con el agua y el azúcar en un cazo. Dejamos que se cuezan a fuego medio y vamos machacando con un tenedor de vez en cuando. dejamos enfriar y listo.
Al enfriar espesa algo más, así que sacadla cuando tenga la textura que os apetezca.