Prometo que no me gustaba el aguacate. O, al menos, eso pensaba yo.
Evitaba por todos los medios añadirlo a las ensaladas. De hecho, en casa sólo lo comía mi madre; yo, ni lo probaba. Y fuera, detestaba que siempre, sin excepción, estuviera presente en los tartar de atún o salmón. Me los estropeaba (puajjj).
Hablo en pasado.
Porque ya no puedo decir que no me guste. O, al menos, en el dulce. Para pastelería me parece un ingrediente estupendo. Aporta jugosidad, cremosidad y un sabor muy particular y agradable a bizcochos, pasteles e incluso ¡¡a las galletas!! Y junto con el chocolate me parece que conforman un tándem muy interesante.
Como es el caso de las cookies que os traigo hoy.
Cuando las publiqué en Instagram, nadie supo cuál era su ingrediente principal. Pues bien, se trataba del aguacate. Una fruta que aporta a las masas una extraordinaria jugosidad, como ya os comenté en la receta del pound cake de aguacate y chocolate. En el caso de estas cookies, conseguimos un interior tiernísimo.
Y una enorme ventaja es que os durarán varias semanas en perfectas condiciones, si las conserváis dentro de una caja metálica, por lo que tendréis galletas caseras para acompañar el desayuno de varios días.
Cookies de agucate y chips de chocolate:
Receta adaptada del libro "An Avocado a Day"
INGREDIENTES (para unas 28 galletas):
75g de light brown sugar
125g de mantequilla, a temperatura ambiente
100g de pulpa de aguacate (aproximadamente, necesitaréis un aguacate pequeño entero)
100g de azúcar blanquilla
2 huevos L
1 cucharadita de extracto de vainilla
260g de harina
1 cucharadita de bicarbonato
3/4 de cucharadita de sal
200g de chips de chocolate
sal marina en escamas, para espolvorear sobre las galletas
PREPARACIÓN
En un bol grande, mezclamos el light brown sugar con la mantequilla, la pulpa de aguacate machacada y el azúcar blanquilla durante unos cinco minutos. Añadimos los huevos, de uno en uno. Y seguimos mezclando. A continuación, incorporamos la vainilla.
Tamizamos juntos la harina, el bicarbonato y la sal, y lo añadimos al bol. Mezclamos con suavidad, sin batir en exceso. Por último, incorporamos los chips de chocolate. Envolvemos la masa en film y la refrigeramos durante unos minutos para que nos sea un poco más fácil trabajar con ella.
Precalentamos el horno a 180ºC.
Sacamos la masa de la nevera y formamos unas 28 bolas, aproximadamente. Las repartimos entre dos bandejas de horno cubiertas con papel vegetal, espolvoreamos un pelín de sal en escamas sobre cada una, y horneamos cada tanda 12 minutos a 180ºC. Dejamos que enfríen sobre una rejilla.
¡¡Un besazo!!
Fuente: este post proviene de Mi recetario por Elena Pilar, donde puedes consultar el contenido original.
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