La crema de naranja y chocolate sin azúcar que os traigo hoy es ideal para cuando no tenemos tiempo de estar en la cocina durante horas preparando un postre, ya que la tendremos lista en tan sólo 10 minutos.
Eso sí, hay tiempo de enfriado… pero es lo de menos! Mientras se enfría puedes hacer lo que quieras, así que en realidad no es tiempo que estés haciendo el postre.
El chocolate es muy calórico, con lo que al mezclarlo con zumo de naranja lo rebajamos un poco, pero no conviene abusar de esta delicia si queremos mantener la línea. Lo ideal es que toméis esta crema como broche final de una comida ligera, para cenar mejor no, que luego no quemamos los hidratos.
Para que todos podamos disfrutarlo, he añadido un par de cosillas a la receta, así está más adaptada a nosotros:
Sin azúcar, solo el natural de la fruta, ya que el chocolate no lleva (endulzado con stevia)
Con mermelada de naranja, que es muy sana, contrasta súper bien con la crema y “llena” un poquito del vaso
Raciones pequeñas, para no pasarnos ni sentirnos muy llenos
Obviamente las medidas que os doy son las recomendadas, podéis hacer raciones más grandes o más pequeñas, pero yo os recomiendo usar éstas (más pequeñas vale, más grandes no).
Normalmente no soy muy fan de mezclar naranja y chocolate, pero tengo que reconocer que me ha gustado el invento. Además, la textura cremosa es similar a unas natillas y me encanta esa sensación suave y agradable en la boca
Os dejo ya con la receta, ¡veréis qué fácil!
Información Nutricional
Cada ración (vasito) de esta crema de naranja y chocolate de 70gr tiene:
168,83 kcal
16,64gr HC
Ingredientes:
150gr de chocolate negro sin azúcar (a poder ser light), 160ml de zumo natural de naranja, 2 hojas de gelatina neutra, Mermelada de naranja sin azúcar
Instrucciones:
Hacemos el zumo de naranja, y lo colamos bien para que no tenga pulpa.
Lo ponemos a fuego medio junto con el chocolate troceado, y vamos removiendo hasta que no nos queden grumitos (si te gusta encontrarte tropezones, puedes dejar algún trocito de chocolate sin fundir del todo).
Añadimos la gelatina hidratada, y volvemos a mezclar hasta que esté bien integrada. Apartamos del fuego y reservamos.
Ponemos una cucharada (o más, al gusto) de mermelada de naranja en la base de los vasitos, cubriéndola.
Servimos la mezcla encima de la mermelada, y dejamos enfriar en la nevera un par de horas. Decoramos, ¡y listo!
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