En esta ocasión te enseño a elaborar una crema pastelera diferente con leche condensada de forma fácil y sencilla, para que tus postres caseros te queden espectaculares.
La crema pastelera sirve de base a muchos postres tradicionales, como la crema catalana o las natillas, pero también es un relleno perfecto para tartas y tartaletas, que combina especialmente bien con las frutas o los frutos secos, como ves está crema pastelera está repleta de posibilidades a cuál más deliciosa.
¡Así que toma nota y prepárate para disfrutar!
(Con estás cantidades sale unos 400 gramos de crema pastelera)
Ingredientes:
200 grs. de leche condensada.
300 ml. de leche entera.
2 yemas de huevo L.
40 grs. de fécula o harina fina de maiz (maizena).
1 Cdta. de pasta o extracto de vainilla.
3 o 4 tiras de cáscara de limón.
25 grs. de mantequilla sin sal (cortada en dados).
Preparación:
Echamos la leche, las tiras de cáscaras de limón y la vainilla en un cazo, ponemos a fuego medio y sin dejar de remover dejamos hasta que hierva, retiramos del fuego y tapamos el cazo, dejamos infusionar 10 minutos.
En un bol echamos la leche condensada, la maizena y las yemas, mezclamos con unas varillas manuales hasta que quede bien integrado y sin grumos.
Incorporamos poco a poco la leche infucionada sin dejar de remover hasta integrarlo todo.
Echamos la mezcla en el mismo cazo pasándola por un colador y ponemos a fuego medio removiendo continuamente hasta que espese.
Retiramos del fuego, añadimos la mantequilla cortada en dados y mezclamos nuevamente hasta integrarla.
Vertemos en un bol y cubrimos con papel transparente (film) de forma que esté en contacto con toda la superficie de la crema (así evitaremos que se seque la parte superior), dejamos enfriar por completo a temperatura ambiente y luego metemos en la nevera hasta el día siguiente.
Al día siguiente ya la tendremos lista para utilizarla en nuestras elaboraciones.