Suponemos que si estás leyendo esto, tú también eres un auténtico fan de los polos caseros de frutas, de yogur, de chocolate… Por eso, hoy te vamos a enseñar cómo hacer polos caseros de todo tipo de sabores. Nuestra propia versión de helados de hielo con la que refrescarnos en los meses más hot del año. ¿Te apuntas?
Recetas de polos caseros para el verano
Existen multitud de posibilidades para hacer polos caseros. Así, podemos preparar polos de frutas (como sandía, melón, melocotón, fresas y frambuesas, naranja, limón, etc.), de chocolate blanco o chocolate negro, polos de yogur, de café, de licor o de una combinación de varios de estos ingredientes. Tú decides cómo personalizar los ingredientes de tu propio polo helado, y así crear el polo que más encaje con tus gustos.
Lo primero que necesitarás a la hora de comenzar con la elaboración de la receta de los polos de verano, es contar con unos moldes que le den forma a nuestros helados. Son muy fáciles de encontrar en cualquier tienda física de menaje, pero también por Internet. Te proponemos algunas opciones de moldes para que tus polos te queden perfectos:
Por si no lo sabías, los polos caseros suponen una excelente manera de que los niños coman fruta durante estos días. Además, estos helados de hielo (sobre todo los elaborados a partir de frutas) contienen agua y muchas otras vitaminas que mantendrán a los más pequeños hidratados y llenos de energía para disfrutar de los largos días en la piscina.
A continuación te enseñamos cómo hacer distintas recetas de polos caseros, para que los pruebes todos y luego decidas cuál es tu favorito.
¿Cómo hacer polos caseros de frutas?
En función del tipo de fruta que elijas y de su contenido en agua, obtendrás unos helados más cremosos o más ligeros. Por ejemplo:
Helados ligeros: melón, sandía, naranja, limón, etc.
Helados cremosos: fresas, cerezas, frambuesas, melocotones, paraguayas, etc.
Otra opción con la que también puedes conseguir unos polos caseros de fruta deliciosos, es a partir de la combinación de varios tipos de fruta como melocotones y paraguayas, fresas y frambuesas…
Para la elaboración de esta receta de polos caseros tan solo necesitaremos contar con las frutas y (opcionalmente) con azúcar.
Elaboración:
En el caso de frutas como la naranja o el limón, simplemente tendremos que extraer su zumo utilizando un exprimidor y lo reservamos. En el caso del resto de frutas (fresas, frambuesas, melocotón, sandía…), trituraremos su carne utilizando una batidora eléctrica, hasta obtener una textura tipo papilla.
Añadiremos una cucharadita de azúcar a cada uno de los sabores (2-3 cucharadas de azúcar en el caso del polo de limón para rebajar su acidez) y mezclaremos bien para que el azúcar quede bien integrado. Introducimos la fruta triturada en el molde del polo casero y meteremos en el congelador durante aproximadamente 3 horas.
¿Cómo hacer polos de yogur?
Se trata de una receta de polos caseros ideal para los niños que estén acostumbrados a comer yogures tipo petit-suisse, ya que su sabor es bastante similar.
Ingredientes:
200 gramos de fresas limpias
2 plátanos maduros cortados en trocitos
2 yogures naturales o griegos
1 cucharada grande de azúcar glas.
Elaboración:
Introducimos todos los ingredientes en el vaso de la batidora y lo trituramos hasta obtener un batido, en el que no haya grumos. Introducimos la mezcla resultante en los moldes y dejaremos reposar en el congelador durante unas 3 horas. ¡Y ya estarán listos!
Para sacar nuestros polos caseros de los moldes, tan solo tendremos que rociar el molde con agua caliente. Poco a poco nuestro polo se irá desprendiendo y lo podremos sacar sin ningún problema.
¿Cómo hacer polos de chocolate?
Estos son los helados de hielo más irresistibles para los golosos de la casa. A nosotros una de las recetas de polos de chocolate que más nos gusta es la siguiente.
Ingredientes:
100 ml de leche
125 ml de nata (crema de leche) para montar
100 gramos de chocolate negro en tableta
1 cucharada de cacao en polvo
Elaboración:
En primer lugar mezclamos la nata (crema de leche), la leche y el cacao en polvo en una cazuela y lo calentamos. Cuando la mezcla esté caliente, la colamos y la vertemos sobre otro bol en el que tendremos las onzas de chocolate. Moveremos bien la mezcla, hasta que el chocolate se haya derretido por completo.
Vertemos este chocolate con leche en cada uno de los moldes y lo llevaremos al congelador donde deberá enfriarse durante 3-4 horas.
Si en cambio, eres de los que prefiere helados más cremosos y sientes debilidad por el chocolate, te contábamos cómo hacer helados caseros de chocolate en este artículo.
Y para ti, de entre todas estas recetas de polos caseros para el verano, ¿cuál es tu preferida? No te preocupes porque no tienes que decantarte por una, ya que lo bueno de esta elaboración es que es tan sencilla que puedes elaborar tantos polos caseros como desees.
¡Buen provecho!