Aquí en el blog ya hablamos de este estupendo y versátil alimento, hoy vuelvo a poneros la entrada en la que trate de explicaros, porque debíamos de eliminar el miedo que nos provoca su consumo.
De modo que felicitamos al huevo en su día…y repasamos sus estupendas cualidades.
Os dejo también un enlace a otra entrada en la que aprendíamos a escoger un buen huevo, ¿Sabes cuál es el mejor huevo?
El huevo un gran alimento
Comenzamos o mejor dicho continuamos con el huevo. Ahora lo vamos a conocer desde el punto de vista nutricional.
El huevo es un gran alimento, contiene proteínas, grasas y es una interesante fuente de vitaminas y minerales, como se puede observar en esta tabla, que refleja los datos de un huevo de tamaño M.
Puede estar presente, aunque aquí en España no tenemos mucha costumbre, en el desayuno, también en la comida, o en la cena e incluso en la merienda.
A pesar de todas estas bondades, su consumo se ha visto desde hace unos años muy cuestionado.
Huevo y colesterol … pareja de amigos.
Seguro que todos hemos oido en multitud de ocasiones “no hay que tomar más de 2 huevos por semana que es malo para el colesterol” ¿a qué si ?
Un huevo de tamaño M aporta unos 250 mg de colesterol por término medio. También debemos conocer y saber que este lípido o grasa, el colesterol, es necesario para el correcto funcionamiento de nuestro organismo.
Desempeña un papel fundamental en la formación de:
algunas hormonas, vitaminas y sales minerales.
forma parte de las membranas celulares.
es necesario para el funcionamiento del cerebro y del sistema nervioso.
tiene funciones reparadoras y protectoras.
Además, tras muchísimo estudios, realizados en numerosos países, durante casi más de 20 años se ha llegado a la conclusión, de que:
el huevo, por si solo, no es el causante de que en nuestras analíticas salgan valores elevados de colesterol.
Existen numerosos otros factores que conducen a ello como son:
la vida sedentaria, tabaco, estrés, nuestra predisposición genética…
y un factor determinante como es el consumir alimentos ricos en grasas saturadas, “las malas”, muy muy presentes estas, en los alimentos procesados.
Debemos tener claro, que el colesterol que contienen los alimentos, no influye tanto como se pensaba hace unos años, en el aumento del colesterol en sangre.
Para saber si un alimento va a influir sobre nuestro colesterol, no debemos juzgarlo por la cantidad que contenga de este, sino que debemos observar, la relación entre grasas instauradas, “las buenas” y las grasas saturadas, “las menos buenas” y si esta relación es alta a favor de las grasas buenas, consideraremos que ese alimento en cuestión tiene un buen perfil lipídico.
En el caso de nuestro huevo esa relación es muy buena, ya que la cantidad de ácidos grasos instaurados (monoinsaturados AGM y polinsaturados AGP), “las buenas” es mayor que la de grasas saturadas ( AGS), “las malas”.
Y si esto no te convence, que debería, te doy una razón más, el huevo posee un tipo de grasa o lípido, en concreto un fosfolípido, llamado lecitina que impide que el colesterol se pegue en las paredes de nuestras arterias.
Conclusión, no hay motivos para dejar de consumir huevos por su contenido en grasas y/o colesterol, de manera que si estamos sanos, podemos tomar un huevo diario si nos apetece.
Proteínas, vitaminas y minerales, todo en un huevo
Y para no hacer más largo el tema del huevo y que os canséis de leer, comentaros que las proteínas que este posee son de gran calidad ya que contiene todos los aminoácidos esenciales que nuestro organismo necesita y en la proporción correcta.
Su contenido en vitaminas es excelente, en la clara encontramos vitaminas del grupo B y en la yema aparecen la vitamina A, D, E y K así como también ácido fólico.
Solo podemos ponerle una pega en este sentido y es que no contiene vitamina C, nadie es perfecto…ni siquiera el huevo, que se le va a hacer.
Y por último contiene minerales como fósforo, hierro, yodo, manganeso, selenio, este último tiene propiedades antioxidantes y previene de enfermedades degenerativas. Estos contenidos en minerales del huevo dependen muchas veces de la alimentación que se le suministre a las gallinas.
Como hemos visto, el huevo, es un muy buen alimento que podemos y debemos consumir sin miedo pues sus beneficios son muy grandes y nos evita el tener que tomar complejos vitamínicos de esos que venden en farmacias.
Espero haberos ayudado a perder el miedo a consumir este gran alimento.
Fuente: este post proviene de Aprender a Comer Bien, donde puedes consultar el contenido original.
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