Si queréis saber más sobre este maravilloso producto, continuad leyendo el artículo.
El jamón de Guijuelo recibe este nombre, porque es un jamón ibérico curado con Denominación de Origen en el municipio de Guijuelo (provincia de Salamanca).
El clima continental seco que hay en esta zona, hace que estos jamones sean tan especiales. El proceso de curación se hace en bodegas especiales, donde los jamones reciben los vientos secos y fríos de la Sierra de Gredos y Béjar.
Los cerdos son criados en libertad en grandes dehesas, donde en ocasiones coexisten con ganado vacuno y ovino. Controlando todas las etapas del ciclo, desde que nacen, su crianza en el campo, hasta lograr alcanzar el producto final. Una laboriosa evolución en el proceso, en la que se cuida al máximo el bienestar del animal y el medio ambiente, un buen ejemplo de ello lo tenemos en Revisan Ibéricos.
Si hay algo de lo que podemos presumir en España es de nuestro jamón ibérico el cual está incluido en nuestra dieta mediterránea. Se han hecho numerosos estudios de los beneficios del jamón ibérico en nuestra salud.
Hay estudios que confirman que el jamón ibérico es beneficioso sobre el colesterol y la tensión arterial. Ya que la composición de su grasa cuenta con un alto contenido de ácido oleíco. Debido a la genética del cerdo ibérico, hace que sus jamones sean los que menos sal contienen de todo el mercado. La grasa infiltrada en su interior y su ph más elevado, impide que la sal penetre en su interior.
Su carne es una gran fuente de proteínas y vitaminas del grupo B, como: B1, B6, B12. También es rico en hierro, magnesio, ácido fólico y vitamina E.
El jamón ibérico, según los expertos es considerado un alimento apto para dietas bajas en calorías, siempre que se tome con moderación.
Los expertos destacan, que nuestra salud cardiovascular se ve beneficiada, reduciendo los riesgos en enfermedades de tipo circulatorio, ya que aquí es esencial el papel de la quercetina, un flavonoide derivado de la bellota y que está presente en su carne.
Por lo tanto, comer jamón ibérico nos beneficia en períodos de anemia, ayuda al crecimiento, regula la tensión arterial y el colesterol debido a sus ácidos poliinsaturados, más conocidos como grasas saludables. Así pues, es recomendable para la buena salud, su consumo, salvo que por prescripción médica se recomiende lo contrario. Así es que, después de saber todos los beneficios que se pueden obtener de este maravilloso producto, como es nuestro jamón ibérico, no puede faltar en ninguna mesa, ya que se puede considerar el producto estrella de las Navidades, sabiendo que por muchos años que pasen, ahí estará siempre, presidiendo nuestras mesas.