Siempre que hago empanadillas me viene a la mente el sketch televisivo de "Martes y Trece". Se titulaba "Empanadilla de Móstoles" y simulaba una llamada telefónica al programa radiofónico de Encarna Sánchez, papel que hacía Millán Salcedo. Quien llamaba era Josema Yuste que, con informaciones contradictorias, llegaba a desquiciar a la locutora. Las empanadillas ya eran apreciadas, pero con aquel sketch creo que todavía adquirieron más popularidad.
La empanadilla no es otra cosa que una empanada pequeña. Y la palabra empanada viene del latín "in panis", poner algo dentro del pan. No son propiamente un bocadillo, porque las empanadillas pueden hacerse en una sartén o bien en el horno. Y tampoco son las típicas empanadas gallegas porque la masa no es tan gruesa. La empanadilla es un buen sistema de conservación y transporte de alimentos. Una conservación no muy larga, bien es cierto. Por eso, las empanadillas son ideales para un día de campo, pues pueden comerse frías. Hay tantas empanadillas como ideas tenga quien las haga porque el relleno puede ser de muchas clases. Nosotras las hemos hecho de chorizo.
RECETA.
INGREDIENTES
Un paquete de obleas para empanadillas.
Una cebolla.
Un pimiento verde.
Un pimiento rojo.
3 cucharadas de tomate frito casero.
Aceite.
100 gr de chorizo cortado en trocitos.
Un huevo.
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PREPARACIÓN
Lavar y cortar las verduras en trocitos.
Poner una sartén con aceite en el fuego y cuando esté caliente añadir las verduras e ir dando vueltas de vez en cuando hasta que estén bien fritas.
Agregar el tomate frito y el chorizo cortado en trocitos y dejar unos minutos más en el fuego para que se mezclen bien los sabores. Retirar del fuego y esperar a que se enfríe.
Una vez frío rellenar las empanadillas, pincelar con el huevo batido y poner en una bandeja cubierta con papel sulfurizado e introducir en el horno precalentado hasta que estén doradas.