Un año más traigo una receta de roscón con una presentación diferente.
No acostumbro a cambiar la receta del roscón. Hay dos con las que me siento muy cómoda trabajando y que me garantizan un buen resultado, asi que no suelo variarlas. Lo que si suelo hacer es cambiar la presentación del roscón. Me parece que así se le da un poquito de diversión a la cocina.
Tengo en el blog, presentaciones tradicionales, en formato mini, o a base de bolas que le dan un aspecto encantador.
Pero este año quería hacer una especie de ensaimada con la masa del roscón. Y en ello me puse hace unos dias, porque mi costumbre es ensayarlo antes para ver si funciona y el dia seis preparar el definitivo.
Como os he dicho antes, hay dos masas que me dan mucha seguridad a la hora de preparar este dulce. Una de ellas es una masa fácil de trabajar y muy agradecida mirad como queda en este roscón.
La otra masa es menos gratificante trabajarla, es algo pegajosa y tiene menos levadura por lo que tarda algo más en levar. pero tiene un resultado super esponjoso y delicioso. Las dos me gustan mucho, pero en esta ocasión me he decidido a preparar este experimento con la segunda receta. Creo que me equivoqué, me costó darle forma, aunque con las manos embadurnadas en aceite de girasol lo conseguí.
Y vosotros diréis, si es tan trabajosa ¿porque la usas? Pues porque soy masoquista, jajaja.
No, sin bromas. Podéis hacer esta receta con cualquiera de las dos, una es más fácil de manejar pero las dos dan buenísimos resultados. Y como tenía bastante tiempo para dedicarle a la masa, me decidí por esta.
Bueno después de todo este rollo, os dejo la receta para que os animéis a hacer vuestro propio roscón en casa, sea cual sea la receta que uséis.
INGREDIENTES:
Para el prefermento:
15 gr de levadura fresca
30 ml de leche tibia
7 gr de azúcar
15 gr de harina de fuerza
Masa:
250 gr de harina de fuerza
ralladura de limón y naranja
20 ml de zumo de naranja10 ml de zumo de limón
1 huevo
100 ml de leche tibia (calentamos unos 20 segundos en el microondas)
70 gr de azúcar
1 pizca de sal
40 gr de mantequilla a temperatura ambiente
Para la crema pastelera:
1/2 litro de leche
100 gr de azúcar
3 huevos
1 chorrito de vainilla liquida
25 gr de harina de maiz (maicena)
Para adornar:
Azúcar glass
Fruta escarchada en trocitos, tiras de naranja confitada, azúcar perlada
Guindas en almíbar
PREPARACIÓN:Lo primero es mezclar con una cuchara o tenedor todos los ingredientes del prefermento en un bol y tapar para que repose y haga efecto la levadura.Lo dejamos una media hora.
A continuación preparamos la crema pastelera que debe estar fria para usarla. Ponemos todos los ingredientes en el vaso de la thermomix y programamos 7 minutos a 90º y velocidad 4. Dejamos enfriar en un recipiente tapada con film transparente.
Vamos a aromatizar el azúcar pulverizando en la thermomix el azúcar de la masa con las pieles de naranja y limón. 10 segundos a velocidad 10.
Agregamos la harina, la leche tibia, el huevo, el zumo de naranja y limón y la sal. Mezclamos unos 20 segundos a velocidad 4. Añadimos el prefermento y volvemos a mezclar otros 20 segundos a velocidad 4.
Incorporamos la mantequilla blanda y amasamos 6 minutos a velocidad espiga. Dejamos reposar hasta que doble el tamaño, un par de hora mas o menos.
Sacamos la masa a la encimera y desgasificamos. Yo os recomiendo poner aceite de girasol en la encimera, el rodillo y en vuestras manos. Es mejor que usar harina.
Cortamos la masa en dos partes. Una de ellas la estiramos hasta formar una tira larga y estrecha. La mia media 80 cm de largo y 8-10 cm de ancho. Le ponemos crema pastelera a todo lo largo y hacemos un rulo largo que iremos enrollando sobre si mismo hasta formar una ensaimada. La colocamos con cuidado en una bandeja de horno forrada con papel vegetal.
Con la otra mitad, vamos a hacer rulitos largos, pero no tanto como la anterior. Y enrollamos sobre si mismos hasta formar pequeñas ensaimadas. A estas no les puse crema pastelera. Dejamos en una bandeja con papel vegetal.
Vamos a a dejar reposar las ensaimadas pequeñas y la grande en un lugar cálido, hasta que crezca.
Precalentamos el horno a 180º, y cuando las masas hayan crecido las pintamos de huevo batido por la superficie y decoramos con fruta escarchada, guindas y azúcar perlada. Horneamos unos 35 minutos la ensaimada grande y unos 20 las pequeñas.
Dejamos enfriar y si queremos decoramos con azúcar glass espolvoreado por encima.
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SIN THERMOMIX:
Si no tenemos thermomix, hacemos la masa en un bol grande poniendo la harina y el resto de los ingredientes. Mezclamos bien antes de añadir el prefermento. Amasamos a mano y cuando esté todo bien integrado, añadimos la mantequilla y seguimos amasando. Nos quedará una masa algo pegajosa, pero lisa y brillante. Dejamos reposar hasta que crezca y seguimos como os explico más arriba.
Hacemos la crema pastelera. Todos los ingredientes al vaso y cocinamos siete minutos. Dejamos enfriar tapada con film transparente.
Mezclamos los ingredientes del prefermento con un tenedor.
Dejamos reposar una media hora.
Pulverizamos el azúcar con las pieles de naranja y limón.
Ya está aromatizada.
Añadimos la harina, huevo, zumos de naranja y limón, leche tibia y sal.
Incorporamos el prefermento y mezclamos bien.
Y por último la mantequilla a temperatura ambiente. Amasamos.
Y dejamos que repose dentro del vaso hasta que crezca. Con el frio tarda por lo menos un par de horas.
Cuando ya ha crecido, la dividimos en dos partes. Una de ellas la estiramos hasta hacer una tira larga y estrecha. Usad aceite para la encimera y las manos, os costará menos manejar la masa.
Le ponemos crema pastelera en el centro y vamos enrollando hasta hacer un rulo largo.
Ya tenemos el macro rulo.
Y ahora vamos enrollando sobre si mismo.
Con cuidado lo ponemos en la bandeja de horno con papel vegetal y dejamos que repose por segunda vez.
Con la otra mitad hacemos mini rulos, para formar pequeñas ensaimadas. Estas sin relleno.
Cuando ya han crecido las ensaimadas, pequeñas y grandes, pintamos con suavidad con huevo batido y adornamos. Al horno. Metedlas por separado pues tienen tiempos de cocción distintos.
La ensaimada roscón grande queda super jugosa y tierna.
Y las pequeñas, a pesar de no llevar relleno, son esponjosas y deliciosas.
¡¡Mirad que miga!!