Septiembre es un poco como la cuesta de enero. Todo el mundo vuelve de las vacaciones veraniegas, y aunque muchos sufran el temido y traumático síndrome post-vacacional, otros vienen con las pilas cargadas para empezar una nueva etapa con energía y ganas. Y me incluyo en ese grupo. Me gusta ver el mes de septiembre como "el nuevo curso", para empezar nuevos proyectos, lanzar ideas y cumplir propósitos de esos que da pereza todo el año.
Esta ensalada lleva en mi libreta de recetas por publicar desde principios de verano, y no quería que acabara la temporada sin publicarla. Aún quedan un par de semanas largas antes de que llegue el otoño oficialmente y se dé por zanjada la temporada de recetas fresquitas. Así que antes de que eso ocurra, aquí va una idea para alegrar nuestras ensaladas aprovechando las buenas frutas de verano que aún quedan antes de que vayan desapareciendo con el frescor otoñal.
Los melocotones quedan riquísimos ya sea hechos a la brasa en la barbacoa, en el horno o en una plancha con grill que es como los he hecho yo esta vez.
Así que para empezar la "cuesta de septiembre" y que la vuelta a las rutinas no se haga tan ardua, esta vez os traigo esta receta, muy sencilla y socorrida. Perfecta para prepararte con antelación y llevártela en un táper o tarro a donde quieras.
INGREDIENTES:
1 lechuga romana y rúcula
3 melocotones maduros
Nueces pecanas troceadas
Albahaca, orégano y perejil seco
3 rebanadas de panPara la vinagreta:
2 yemas de huevos ecológicos
1 lata de anchoas en aceite de oliva (usaremos unas 7-8)
1 cucharada de mostaza Dijon
1 ajo pequeño pelado
3 cucharadas de zumo de limón
1/2 taza de aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta negra
PREPARACIÓN:
Primero haremos los croutons o picatostes para que se vayan enfriando.
Corta las rebanadas de pan en trozos pequeños con las manos, y en un bol rocíalos con un poco de aceite de oliva virgen extra, perejil seco y un poco de sal.
Calienta una sartén a fuego medio-alto y una vez caliente, saltea el pan hasta que quede bien dorado y tostado.
Retira y deja encima de papel absorbente hasta que se enfríen del todo.
Lava y seca los melocotones, córtalos en rodajas no muy grandes y mételos en un bol con aceite de oliva, espolvorea un poco de orégano y de albahaca y mezcla con las manos.
Calienta la sartén con grill a fuego medio-alto y coloca los melocotones. Ve dándoles la vuelta cuando veas que ya están dorados. Retira y deja enfriar. También puedes servirlos templados.
Ahora haremos la vinagreta. Con el mortero muele las anchoas junto con el ajo hasta conseguir una pasta. Añade la mostaza y el limón y mezcla.
Después vierte en el recipiente que vayas a usar para batir, yo en este caso uso la batidora de mano y su vaso.
Añade las yemas de los huevos y después muy poco a poco el aceite de oliva mientras sigues batiendo sin parar y consigas una textura cremosa y homogénea.
Sirve la lechuga y la rúcula con los picatostes, unas nueces picadas, unos trozos de melocotón, un poco de vinagreta, mezcla y ¡listo!