El otro día pasaron mis vecinos a devolverme un plato que les habíamos pasado con un trozo de tarta (obviamente yo no me como TODO lo que cocino) pero el plato no vino solo. No. Vino acompañado de otro plato lleno de angulas de monte, unas setas que ellos mismos habían recogido. No se pueden imaginar la ilusión que me hizo ya que no suelo hacer muchas cosas con setas. Tenía que aprovechar para preparar platos con ellas.
Pronto se me ocurrió esta opción. La pasta queda buenísima con setas. El problema era que no conocía estas setas (perdón a todos los micólogos y amantes de las setas) y no sabía si quedarían bien acompañando a la pasta. Así que decidí hacerme unas setas solas primero para probarlas y después preparar la receta.
¡Menuda sorpresa! Son unas setas muy finas y muy ricas. No tienen un sabor muy potente, son ligeras y tiernas. No son toscas como algunas setas que podemos encontrar. Desde el momento en el que las probé sabía que iban a ser perfectas para este plato.
Así que me lancé a la aventura.
Y el resultado fue fantástico.
La mezcla es perfecta. Combinan muy bien ya que la salsa con setas lo hace un plato delicado. Son setas que casi se deshacen en la boca, no hay que hacer ningún esfuerzo para comértelas. ¡Menudo descubrimiento el de estas setas!
Ahora, cambiando de tema... ¡solo quedan dos días para mi primer CumpleBlog! ¡Qué nervios! He preparado algo especial, ya lo veréis el domingo, no seáis impacientes (yo ya estoy cardias, si no fuese porque he decidido tranquilizarme y aguantarme yo lo hubiera publicado todo hace una semana).
Os veo a todos el domingo por aquí que además os traigo una receta fantástica para celebrar el primer cumple de Jaleo en la Cocina y para dar el pistoletazo de salida a las recetas navideñas. Sí, me he negado rotundamente a publicar nada antes de diciembre. No se pueden adelantar tanto las Navidades. En unos años empezarán a poner los turrones ya después de Semana Santa... En fin, os dejo la receta que seguro que os encanta.
Espaguettis con angulas de monte
Dificultad: Fácil
Raciones: 4
Etiqueta: Pasta
400 gr de espaguetis
300 gr de angulas de monte (u otra seta)
350 ml de nata (crema de leche) para cocinar
Una pizca de sal
Perejil
- Lavamos bien las angulas de monte. Tenemos que cerciorarnos de que están muy limpias antes de echarlas a la sartén para hacer la salsa.
- Comenzamos llenando una cacerola de agua y la ponemos a fuego medio-alto.
- Cuando comience a hervir añadimos la pasta y la mantenemos durante 10 minutos, más o menos, a fuego medio-alto. Removemos de vez en cuando.
- Añadimos una pizca de sal.
- Probamos a ver si están bien hechos. No tienen que estar muy blandos, pero tampoco duros, claro.
- Escurrimos y reservamos.
- Mientras se cuecen los macarrones podemos ir preparando la salsa de setas. En una sartén amplia echamos aceite y lo calentamos.
- Cuando esté caliente (tarda poco, ¡cuidado que no se os queme!) añadimos las setas. Al principio os parecerá que hay muchas, pero se reducen muchísimo debido a la cantidad de agua que tienen.
- Freímos bien, hasta que veamos que están bien hechas.
- Añadimos la nata (crema de leche), una pizca de sal y el perejil en trozo no muy pequeños.
- Damos vueltas con una cuchara hasta que esté todo bien ligado y la nata (crema de leche) haya adquirido un poco de espesor.
- Añadimos los espaguetis a la sartén y mezclamos bien.
- Decoramos con un poco más de perejil.
- Servimos en caliente.
¡A disfrutar!
- Echar aceite a la cacerola para que no se pegue la pasta no sirve de nada, lo importante es que haya agua abundante como para cocer la pasta.
- Para que no se nos seque mucho la pasta es mejor que haya salsa abundante.
- Además, es mejor hacer la salsa mientras se cuecen los espaguetis para así poder añadirlos nada más hacerse, ya que después de escurrirse se secan enseguida. Otra opción es escurrir la mitad del agua y mantenerlos un poco más de tiempo.
