Pero antes, como siempre, permitidme contaros algunos datos interesantes sobre este genial postre.
El flan es, sin ningún género de dudas, el postre más consumido en nuestro país. Las razones de su éxito son evidentes: fácil, rápido y económico, sin renunciar a un sabor que gusta tanto a niños como a mayores.
Admite multitud de combinaciones, desde el flan de huevo tradicional, hasta otras más exóticas o inusuales, como este flan de turrón que os traigo hoy.
¿Cuáles son los origenes del flan? Los primeros registros corresponden a la Antigua Roma, con el tyropatina, una herencia recibida directamente de los griegos.
La domesticación de las aves de corral, trajo consigo un creciente consumo de huevos, a los que les atribuían poderes afrodisiacos, con los que, entre otras cosas, elaboraban platos tan deliciosos como este.
Sin embargo, aún no habían logrado perfeccionar la receta lo suficiente, y fue en la Edad Media, cuando adoptó los estándares actuales, es decir, la combinación de huevos, leche y miel como endulzante, que acabó siendo sustituida por el caramelo. Su preparación estaba limitado prácticamente a la cuaresma, que junto a las torrijas y las gachas, constituían la mesa del pueblo.
Mucho ha llovido desde entonces, pero la popularidad del flan ha ido en aumento.
Por su parte, los orígenes del turrón aún siguen siendo objeto de acalorados debates, aunque en contra de lo que se suele creer habitualmente, no están en Italia, sino en algún lugar indeterminado de la cuenca mediterránea.
El turrón blando sí puede considerarse un invento jijonés.
Pese a que, como he mencionado anteriormente, existen diversas maneras de interpretar esta maravillosa dulcería, lo cierto es que el flan de turrón se configura como una de las mejores.
El turrón blando de Jijona, compuesto por almendra marcona tostada, miel y azúcar, es una delicia de la que tan solo disfrutamos en Navidades, pero está tan delicioso que no sería mala idea extender su consumo a todo el año.
Cómo hacer flan de turrón fácilmente en Thermomix
A muchos les parecerá que el flan, aparentemente sencillo, lleva un trabajo detrás, nada desdeñable.
Para esas personas va dedicada esta receta, que elimina los huevos de la ecuación sustituyéndolos por sobres de cuajada.
Si a esto le sumamos el hecho de que va a ser cocinado en la Thermomix, obtenemos un postre inigualable en cuestión de minutos.
Ingredientes:
Turrón blando de Jijona 200 g.
Leche entera 500 ml.
Nata (crema de leche) líquida 35% M.G. 200 ml.
Azúcar blanquilla 100 g.
Sobres de cuajada 2 unidades - Comprar
Elaboración:
No entraña demasiado misterio. Simplemente, introduciremos el turrón troceado por el bocal y programaremos 5 segundos a velocidad 5. A continuación, incorporaremos el resto de ingredientes de la lista, mezclando durante 5 segundos a velocidad 5. Seguidamente, marcaremos 8 minutos, a velocidad 2 y medio, con una temperatura de 100º C.
Finalmente, verteremos la mezcla en un molde o varios individuales, dejaremos atemperar y refrigeraremos. Evidentemente, el cuajo tiene que hacer su trabajo, que le llevará unas cuantas horas. Recomiendo mantener en la nevera al menos 12 horas antes de proceder a desmoldarlo, por lo que idealmente lo cocinaremos con un día de antelación.
Los acompañamientos para el flan son variopintos, desde una sencilla y rica nata montada (crema de leche), hasta una quenelle de helado, por ejemplo, de pistacho. Se trata de un postre a todas luces básico, que no implica tiempo ni conocimientos técnicos, pero con el cual podemos llegar a sorprender si sabemos bien con qué acompañarlo, transformándolo en algo más llamativo.
Antaño era frecuente ver alguna guinda coronándolos, o incluso alguna grosella o similar. Las clásicas galletas maría, también son recurso bastante empleado, así como los frutos secos, especialmente las nueces o las almendras. Como sugerencia de presentación, os propongo que fijéis el flan al plato con un crumble de galleta, y al lado coloquéis una bola de helado a vuestra elección.
Para llevar a cabo el crumble, cogeremos 75 gramos de galleta, 75 gramos de azúcar moreno, una cucharadita de canela molida, 75 gramos de almendras tostadas y 60 gramos de mantequilla fría. En primer lugar, trituraremos las galletas y las almendras, configurando 2 segundos a velocidad 4 - 5, siempre que la almendra la hayamos comprado entera y no triturada, claro.
Añadiremos la mantequilla fría en dados, el azúcar y la canela, programando nuevamente 2 segundos a velocidad 4 - 5. Hay quienes para rematarlo, y dejarlo seco, con una textura más terrosa, le dan un pequeño golpe de calor, no para cocinarlo, sino para quitarle la humedad. Es un topping muy socorrido que añadirá sofisticación y sabor a nuestros platos.
¡Qué aproveche!
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Fuente: este post proviene de Cocina Thermomix, donde puedes consultar el contenido original.
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