El flan es un postre que puedes preparar cargado de calorías como el flan de leche condensada, o ligero si sustituyes el azúcar por edulcorantes y la leche por leche desnatada. Lo hagas como lo hagas, todos los flanes salen riquísimos y son nutritivos.
Ingredientes:
4 huevos.
100 g de azúcar
1 vaina de vainilla
500ml de leche.
Para el caramelo:
5 o 6 cucharadas de azúcar.
5 o 6 cucharadas de agua.
Modo de hacerlo:
Precalienta el horno a 150º.
Corta en trocitos pequeños la vaina de vainilla, añádelos a la leche y tritura a máxima potencia durante unos segundos.
Cuela la leche con un colador fino. No tires los trocitos de vainilla, deja que se sequen y guárdalos para otra ocasión.
Pon los huevos en un bol y bátelos ligeramente, añade el azúcar y sigue batiendo.
Echa la leche avainillada sobre la mezcla de huevos y mezcla bien.
Haz el caramelo:
Pon el azúcar y el agua en una sartén y deja cocer a fuego lento.
Cuando empiece a tomar color castaño, aparta del fuego y espera unos segundos para que desaparezcan las burbujas.
Vierte el caramelo en las flaneras y extiéndelo bien por todos los lados.
Termina de rellenar las flaneras con la mezcla de huevos y leche.
Cuece en el horno al baño maría durante una hora más o menos, depende de tu horno.
Comprueba si está cocido pinchando con una aguja larga, si sale manchada de crema es que todavía le falta un tiempo, si sale limpia ya está hecho.
Cuando estén hechos, saca del horno y deja que se enfríen a temperatura ambiente, luego ponlos en la nevera.
No debes preocuparte si el flan está unos minutos de más en el horno, cuanto más cuajado, menos se romperá al desmoldar. Pero lo que si que debes tener la precaución de que esté bien frío antes de servirlo.
Espero que te guste.