Una de las recetas más sencillas que conozco, y también de las más famosas. No puede fallar si las fresas son buenas. Perfecta para verano: mucho calor, pocas ganas de meterte en la cocina y gusto por los postres fresquitos y sabrosos.
La verdad es que, ahora en agosto, encontrar fresas que estén aún de temporada ya no es fácil, y si tenéis esa suerte pueden ser de las últimas de este verano. El postre por excelencia que podéis preparar con ellas son unas fresas con nata montada (crema de leche).
Esta receta es conocida en el mundo entero. Me recuerda las grandes comidas familiares de primavera que teníamos en mi casa cuando era pequeña. También en los años 80 estuvieron muy de moda y cuando era temporada de fresas este postre se servía en todas las casas y restaurantes, con la nata montada (crema de leche) de spray, muy en boga en la época, e incluso la gente añadía azúcar por encima de la nata (crema de leche) ¡perdón nutricionistas!. La nata (crema de leche) en spray sustituyó a la nata (crema de leche) de verdad, la nata (crema de leche) que montábamos en casa, y creo que este fue el fin de las fresas con nata (crema de leche). Pero hoy en día estamos recuperando la combinación de sus sabores: las fresas y la verdadera nata montada (crema de leche).
Si no os gusta la nata (crema de leche) demasiado, o queréis una versión más ligera del postre, podéis usar queso quark batido en lugar de nata (crema de leche), e incluso, para que resulte un poco más dulce, rallar un poco de chocolate por encima: está delicioso. Si pones el chocolate puedes mezclar un poco más el queso con las fresas sin miedo a que el queso se te venga abajo y no será necesario que añadáis azúcar para endulzar.
El secreto precisamente de este postre creo que está en lo que nos puede hacer recordar, pero sobre todo, en lo que nos puede transmitir. Y es que su sabor, que es dulce pero a la vez fresco, y con esos toques ácidos de la fresa, nos transmite un enorme placer al paladar.
Ingredientes:
1 kilo de fresas.
Nata montada (crema de leche) o si prefieres un brick de nata (crema de leche) para montar
60 gramos de azúcar
Láminas de almendra para decorar
Preparación:
En primer lugar lavad las fresas y cortadlas en trocitos.
Ponedlas en un bol grande y echadles un poco de azúcar y removed para que suelte el jugo y cojan más sabor.
Se sirven en un platito, en copa, en vaso, o en un bol pequeño, según os dicte vuestra imaginación y después añadís la nata montada (crema de leche). Para decorar podéis usar unas láminas de almendra.
¡Disfrutad de vuestras fresas con nata (crema de leche)!! Sorprended a vuestra familia y amigos.