¡Disfrutad de la Temporada Navideña con los Tradicionales Polvorones de Almendra!
La época festiva en España no estaría completa sin mencionar uno de los tesoros culinarios más emblemáticos de estas fechas: ¡los polvorones de almendra! Estos exquisitos bocados “desmoronables”, que se deshacen al comer, son una delicia para el paladar y un acompañante perfecto para endulzar las fiestas.Los polvorones tienen sus raíces en la comunidad andaluza, específicamente en Antequera y Estepa, donde desde el siglo XVI se adoptó la práctica de utilizar manteca de cerdo en la repostería. Esto se debió a la abundancia de encinas en los bosques, que eran el hábitat principal donde se criaba este animal.
La receta de los polvorones tiene una historia arraigada en nuestras tradiciones culinarias y cada mordisco es un viaje que nos lleva a la esencia misma de la Navidad. Este dulce, que se deshace en la boca, es la combinación perfecta de textura, sabor a almendra y un toquecito de canela que nos hace suspirar con cada bocado.
Polvorones y mantecados
Aprovecho para contaros la distinción entre mantecados y polvorones que radica principalmente en dos aspectos clave: la proporción de manteca utilizada y el tiempo de horneado.En primer lugar, los polvorones contienen una menor cantidad de manteca en comparación con los mantecados.
Esta diferencia en la proporción de ingredientes influye directamente en el proceso de horneado. Los polvorones, al contener menos manteca y más harina, requieren un tiempo de horneado más breve en comparación con los mantecados.
Como resultado de estas variaciones en la receta y el tiempo de horneado, los polvorones y los mantecados presentan diferencias notables en sabor y textura. Los polvorones tienen sabor un sabor menos intenso a manteca, mientras que los mantecados suelen ser más mantecosos y tienen una textura más densa y suave.
A diferencia de los mazapanes o turrones, cuyas recetas datan desde el siglo XVI, los mantecados y polvorones son más contemporáneos y no se mencionan en documentos anteriores al siglo XIX.
Polvorones
Dificultad: muy fácil
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Ingredientes
200 g de harina de trigo
50 g de almendra molida
100 g de manteca de cerdo a temperatura ambiente
75 g de azúcar glasé
2 g de Sal
Para aromatizar: una cucharadita de canela, o la ralladura de 1 limón, o una cucharada sopera de anís dulce…
Preparación
Tostad la Harina y la Almendra: Precalentad el horno a 180 ºC con calor arriba y abajo. Extended la harina en una bandeja y la horneáis durante unos 15 minutos hasta que esté ligeramente tostada. Haced lo mismo con la almendra molida, horneadla entre 8 y 10 minutos. Luego, dejad enfriar ambas.
Preparad la Masa: Tamizad la harina tostada y la colocáis en un bol amplio. Añadid la almendra, el azúcar glasé, un poco de canela o limón o nada, la sal y la manteca a temperatura ambiente. Mezclad hasta obtener una masa homogénea. Envolved la masa en papel film y la refrigeráis durante al menos 30 minutos.
Formad los Polvorones: Extended la masa sobre papel sulfurizado hasta alcanzar un grosor de uno a un centímetro y medio. Con la ayuda de un cortapastas cortad la masa, o bien podéis formar unas bolitas y les dais forma con la mano, y vais colocando los polvorones en una bandeja de horno con papel vegetal.
Horneado: Precalentad el horno a 210 ºC, calor arriba y abajo, y horneáis los polvorones durante unos 10 minutos. Es crucial vigilar que no se tuesten demasiado porque además podrían amargar. Retirad del horno cuando los bordes se empiecen a dorar y dejad enfriar completamente.
Una vez fríos, espolvoreadlos con azúcar glasé y con mucho cuidado los pasáis a una fuente para servir. Un verdadero tesoro gastronómico.
Web: Commememucho