Galletas de rosas

Hola Cuchariter@:
Antes de que el otoño se instale definitivamente con lluvias, menos horas de sol, frío y tonos más apagados, nos resfriemos y se nos empiece a caer el moquillo, queremos hacer una receta colorida y súper fácil para que la puedas preparar con los ingredientes que tienes en casa. Como lo más normal no es tener un bote de pasta de rosas al lado del aceite y la sal, me hago cargo de ello, el sabor puede cambiar en función de lo que encuentres en tu despensa. Pero ¡ojo!, que te conozco... ni se te ocurra poner lo primero que pilles sin pensar. ¡Échale un poco de sensatez!
Así que hoy nos hemos decantado por hacer unas galletas. Quizás porque las vemos a simple vista más sencillas de preparar y con menos posibilidades de presentación, las valoramos menos que otros postres y les dedicamos menos atención. Pero este semana hemos querido rendirles un homenaje y hacer unas galletas bonitas de verdad, con detalles, color y un sabor alucinante, de esas que dan ganas de disecarlas y no comértelas de lo monas que son: GALLETAS DE ROSAS.

Porque las galletas no son solo para el desayuno, para mojar en el café o en la leche. Pueden ser algo delicado y creativo, que entren por los ojos y al degustarlas te transporten a mil y un lugares por su sabor. ¿Te quedas con La Cucharita para aprender esta receta?
INGREDIENTES (para 20-25 galletas):

La cantidad de galletas resultantes puede variar en función del grosor de tus galletas o el tamaño de tu cortador. Si quieres hacerlas más grandes o más cantidad solo tienes que doblar los ingredientes.
La pasta de rosas es solo una idea: sustitúyela por otra que tengas en casa, por vainilla, chocolate, ralladura de naranja o limón pero, lo más importante, no dejes de hacerlas. Yo tenía todavía el bote con el que hice los Cupcakes de Rosas por ahí dando coletazos y me pareció buena idea darle un poquito de uso.
ELABORACIÓN:
1. Mezcla la mantequilla fría cortada en cubitos con el azúcar hasta tener una masa cremosa y de color pálido.

2. Añade el huevo y bátelo hasta que se integre con la mantequilla. Si es necesario, remuévelo con una lengua repostera rebañando bien las paredes del bol para que no queden restos sin mezclar.

3. Incorpora las cucharaditas de pasta de rosas Home Chef.

4. Tamiza la harina sobre la masa con un colador.

5. A partir de este punto, bate a velocidad mínima.

6. Cuando no queden restos de harina y la masa sea homogénea, deja de batir.

7. Puedes terminar de amasar a mano y darle forma de bola. Envuélvela en film transparente y déjala reposar en la nevera durante una hora para que esté bien firme y puedas trabajar con ella.

8. Transcurrido ese tiempo, estira bien la masa entre dos papeles de horno usando un rodillo consiguiendo un groso de 3-4 milímetros y vuelve a refrigerar otra media hora. Después utiliza tu cortador preferido para darle forma a las galletas. Nosotros hemos usado un cortador redondo y otro en forma de flor.

9. Traspasa las galletas a una placa forrada con papel de horno. Es muy importante que las galletas estén frías en todo momento para poderlas trabajar. Si es necesario porque donde vives hace calor, refrigera nuevamente la masa para traspasar las galletas sin que se deformen porque luego no quedarán igual de bonitas y perfectas. Hornea durante 10 minutos a 180ºC o hasta que veas que los bordes se empiezan a dorar. Recuerda tener el horno precalentado.

10. Una vez horneadas, déjalas enfriar completamente antes de moverlas para evitar que se rompan.
INGREDIENTES PARA LA CREMA DE ROSAS:

1. Bate la mantequilla a temperatura ambiente hasta que esté cremosa. Con unos 5 minutos será suficiente.

2. Tamiza el azúcar glasé por encima y sigue batiendo hasta que esté bien integrado.

3. Por último, añade la cucharada de pasta de rosas y bate de nuevo.

DECORACIÓN:
1. El día anterior prepara unas florecitas de fondant: amásalo y estíralo bien con un rodillo especial para fondant hasta que tenga un grosor de 1-2 milímetros. Cuanto más fino quede, menos empalagoso será. Con un cortador con expulsor en forma de flor pequeñita, ve haciendo las flores y déjalas en un formador de flores para que no se deformen. Nosotros hemos usado flores de dos tamaños distintos.

2. Pon un poquito de pegamento comestible en el centro de la flor y pega ahí una perlita plateada. Déjalas secar de un día para otro para que el fondant se endurezca.

3. Introduce la crema en una manga pastelera con una boquilla 1M de Wilton (o la que más te guste) y haz una rosa en el centro de la galleta con ella. Puedes hacer rosas grandes que abarquen toda la galleta o rosas más pequeñas que cubran solo el centro.

4. En el lugar donde termina el dibujo de la manga, para disimular el corte, pon una o dos florecitas de fondant.

Y aquí tienes estas galletas de rosas delicadas, elegantes, incluso cursis me atrevería a decir, pero que están riquísimas y además quedan muy monas.







Estas galletas son perfectas para una mesa dulce de boda, un bautizo, un baby shower, una comunión y, con la crema que llevan encima, además de decorarlas, conseguimos que estén más sabrosas e irresistibles.
Éstas han volado literalmente porque son muy suaves de sabor, permanecen crujientes y a la vez esponjosas bastante tiempo, como si estuvieran recién hechas, y además son de lo más sofisticado. Te animo a que las hagas en casa y nos cuentes en los comentarios qué tal te han quedado.
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Y ya nos despedimos deseándote una muy feliz semana.
Un abrazo enorme.
Jon