Hola a tod@s!! Hoy os traigo una receta tradicional, de las que están llenas de ingenio y sabor, se elaboraban con los ingredientes que se tenían en las casas recogidos de la propia cosecha un plato saciante y ligero. Los garbanzos viudos imagino que su nombre tiene origen porque no tienen los chorizos, morcillas, pancetas... que suelen llevar este tipo de platos con legumbres de cuchara...el resultado es ideal, yo creo que en los tiempos actuales donde evitamos este tipo de ingredientes con exceso de grasas, conseguimos un resultado inmejorable para no eliminar las legumbres de nuestra dieta y hacer un plato ligero y saludable pero sin restar nada en sabor y calidad en el resultado. Es un plato económico, ideal para vegetarianos y con un sofrito como este de lujo el resultado es una explosión de ricura...antiguamente sería una tragedia servir unos garbanzos así viudos, aunque nuestras abuelas supieron disfrazar muy bien esta escasez en tiempos muy difíciles, hoy es todo un lujo y los disfrutamos agradecemos con una alegría como se merecen estos platos que no pueden perderse porque son una maravilla y deberían estar en plena actualidad.
INGREDIENTES:
50 ml. Aceite de Oliva virgen extra.
4 Dientes de Ajo.
3 Cebolletas frescas.
1 Pimiento rojo.
2 Pimientos verdes.
2 Tomates.
1 Chorro de brandy o vino blanco.
1 Cucharilla de pimentón dulce.
1 Clavo.
5 Granos de pimienta.
1 Hoja de Laurel.
1 Cucharilla de comino en grano.
400 gr. Garbanzos cocidos o 2 Tarros de garbanzos (escurridos y lavados)
Salpimentar al gusto.
Agua o caldo para cubrir los garbanzos (aproximadamente 500-750 ml)
1 Huevo cocido por persona (opcional)
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MODO DE PREPARACIÓN:
En un cazo con agua, sal y chorro de vinagre colocamos un huevo por cada comensal. Lo ponemos a cocer unos 10-12 minutos hirviendo. Dejar templar, enfriar y pelar los huevos reservar. (Esto se puede hacer según estamos preparando el sofrito de verduras que detallo a continuación)
En una olla o paellera grande ponemos base de aceite a calentar. Doramos levemente unos dientes de ajos pelados.
Lavamos, pelamos y picamos las cebolletas y las sofreímos unos minutos con una pizca de sal.
En esos minutos lavamos y picamos los pimientos verdes y rojo. Añadimos a la paellera y sofreir junto con la cebolla unos minutos.
Ponemos un chorro de brandy (si no teneis vino blanco) y dejamos reducir el alcohol unos minutos.
Incluir la cucharilla de pimentón dulce y comino.
Rallamos los tomates (tiramos la piel) y añadimos al sofrito el jugo de tomate, dejamos reducir o sofreir unos minutos.
Añadir el caldo o agua, calentar y mezclar todo bien.
Triturar con la batidora hasta conseguir la textura deseada.
Incorporar el laurel, clavo, grano de pimientas y los garbanzos cocidos.
Remover todo bien y salpimentar al gusto. Dejar cocinar todo junto unos 10 minutos.
Espolvorear con perejil fresco picado y dejar reposar unos minutos.
Emplatar y colocar un huevo troceado sobre cada plato...a disfrutar!
Seguimos con la receta: