Hace mucho tiempo que no publico ninguna receta con cordero, pero como es una de las más preparadas y consumidas en Navidad, quería enseñaros estas garretas para que podáis cocinarla estas fiestas.
El asado de cordero, es uno de los platos estrella de las Navidades, sobre todo en la mayoría de las zonas del centro y norte de la península, aunque también es muy tradicional en cualquier otra zona de España.
Esta receta de garretas de cordero al horno con patatas, y maceradas con aceite de romero y tomillo, es un plato contundente, riquísimo y muy sencillo de cocinar.
Las garretas de cordero, si están bien cocinadas, son muy tiernas y jugosas, y si las aderezas o maceras con hierbas aromáticas, tienen un sabor delicioso que encantará a los comensales.
Además, esta receta va acompañada de una cama de patatas y cebolla que hacen disfrutar a todo el que la prueba, ya que queda un cordero asado tan jugoso y tierno que se deshace en la boca.
Este plato tan extraordinario, es mi aportación al reto Alfabeto Salado de la mano de Elena Miss Pimienta. Este mes, Elena nos ha dejado elegir los ingredientes que quisiéramos, siempre que evoquen a la Navidad o que sean típicos de estas fechas......y el cordero al horno, lo es!!
Como también son riquísimas estas Chuletas de cordero con salsa de cúrcuma y miel.
Ingredientes: (2 personas)
2 garretas de cordero. (400g)
3 patatas.
2 cebollas.
Tomillo.
Romero.
1 vaso de vino blanco.
Aceite de oliva virgen.
Sal.
Modo de hacerlo:
Para conseguir un buen resultado, es muy importante que la carne sea de calidad.
Antes de poner las garretas al horno vamos a ponerlas en maceración:
Mezcla en un bol un buen chorro de aceite de oliva virgen con sal, tomillo y romero.
Remueve para que se mezclen los sabores y deja que repose el aceite unos 5 minutos para que se aromatice de las hierbas.
Pon las garretas en una fuente de horno y úntalas bien con todo el aceite y hierbas, por todos los lados. Deja la carne en maceración durante unos 10 minutos, esto le aportará un sabor más especial al cordero.
Mientras maceran las garretas, precalienta el horno a 190º con calor arriba y abajo.
Pasado el tiempo de maceración y con el horno caliente, pon la fuente con las garretas en el horno y asa durante unos 30 minutos.
Mientras se asa la carne en esta primera vez, preparamos las verduras:
Pela las patatas y las cebollas.
Córtalas en rodajas de medio cm. más o menos.
Saca la fuente con las garretas del horno.
Aparta a un plato las garretas y coloca las rodajas de patata y de cebolla formando una cama en la fuente, salpimenta.
Coloca encima las garretas dándoles la vuelta de como estaban antes, para que se hagan por el otro lado.
Riega con el vaso de vino por encima de las garretas.
Baja la temperatura del horno a 160º para que se cocine a fuego medio.
Pasados 30 minutos, dale la vuelta a la carne y riega con los jugos que vaya soltando. Si ves que se queda un poco seco, puedes añadir más vino o agua para que se ase mejor y queden jugosas.
Ves comprobando la carne, y cuando veas que está tierna o en su punto, puedes sacarla del horno.
Sirve recién hecho y bien caliente.
Esta carne queda más tierna si la asas a baja temperatura y durante más tiempo, así conseguirás que se deshaga en la boca.
El tiempo siempre depende del tamaño de las garretas, pero estará por una hora más o menos.
Espero que te guste.