No le tengáis miedo al amasado! No es para nada como hacer pan (aunque ya visteis en nuestra receta de pan de molde que tampoco era tan difícil), pero esto es mucho más sencillo. Simplemente hay que juntar los ingredientes y amasar unos cinco minutos con la palma de la mano enérgicamente para que se una todo y se desarrolle un poco el gluten. Veréis que en poco tiempo la masa ya queda bien lisita, dura y se despega con facilidad de las manos.
Esta masa luego la dejaremos reposar una media hora para que el gluten acabe de desarrollarse y posteriormente la estiraremos para darle forma. Esto puede hacerse de dos formas, con el rodillo sobre una encimera o, como nosotros aconsejaríamos, con una máquina para pasta fresca . Por el precio que tienen, es una muy buena compra ya que a la larga veremos que con esta receta se nos hará muy fácil hacer nuestra propia pasta y nos engancharemos a hacerla. Además, el resultado que obtenemos no es comparable con hacerlo con rodillo a mano, ya que lo deja mucho más fino y del mismo grosor. Nosotros tenemos esta comprada en Amazon desde hace unos años y la verdad es que funciona perfectamente, además con ella casi no se mancha la cocina de harina.
Una vez tengamos la masa de la pasta fresca muy finita, la enharinamos un poco más y la cortamos con la forma que queramos. A nosotros lo que más nos gustan son los tallarines. La máquina de pasta fresca ya lleva incorporado un accesorio para cortar las láminas para tallarines, pero sino, con un cuchillo bien afilado, podemos enrollar las láminas y cortarlas con el grosor que queramos.
INGREDIENTES
3 huevos
500 g de harina
ELABORACIÓN
- Comenzamos haciendo un volcán con la harina. Ya sabéis, formar una montaña y hacer un hueco en el medio formando un círculo con la harina.
- Rompemos los huevos en un bol y los añadimos en el centro del volcán. Con ayuda de un tenedor los vamos rompiendo y mezclando poco a poco con la harina. Este es el momento de añadirle un poco de sal si queremos.
- Vamos incorporando la harina poco a poco desde los bordes para formar una masa cada vez más espesa. Como tiene forma de volcán veréis como no ensuciáis casi nada ya que el huevo quedará retenido dentro de el. Para el final, ya casi será una masa sólida con la que podemos trabajar con las manos.
- Acabamos de amasar la pasta fresca con nuestras manos unos 5-10 minutos. Lo haremos con la palma de nuestras manos, ejerciendo poco a poco presión sobre la masa en la encimera. Al principio la masa será bastante grumosa e irregular, pero a medida que amasemos, acabaremos con una masa lisa y elástica, que es lo que nos indicará que la masa está lista.
- La hidratación de la masa dependerá de la humedad que tengamos en casa, el tamaño de los huevos, la harina que hayáis usado... por lo que siempre tener a mano un poco más de harina por si la masa está muy líquida o un poquito de agua si la veis muy seca (si es así, añadir poco a poco, unas gotas y amasar para ver el cambio).
- Tapamos la masa con un trapo y la dejamos reposar durante 30 minutos para que se desarrolle el gluten.
- Dividimos la masa en cuatro partes, e iremos alisando cada una de ellas por separado. Lo más cómodo, como ya hemos dicho, es utilizar una máquina de pasta fresca. Aplanamos un poco con las manos y lo introducimos en la máquina con el rodillo en el primer número. Nosotros pasamos por este número unas 4 veces, para que la masa coja forma. Una vez hemos pasado por el 1 las 4 veces, vamos subiendo los rodillos y pasando la masa 1 vez con cada número. Nosotros la hacemos pasar hasta el número 6, pero dependerá de si os gusta la pasta más finita o más gruesa. Es muy importante que tengáis harina a mano e ir añadiendo un poco con la palma de nuestras manos cuando veamos que la masa va humedeciéndose al pasar por los rodillos.
- Por último, queda darle forma. Como ya os hemos dicho, nuestra máquina tiene un accesorio que como si fuera un rodillo más, al pasar la masa por el nos corta la pasta en forma de tallarines, pero sino también podéis hacerlo a mano. Dobláis la masa como si fuera un libro y con un cuchillo hacemos cortes del grosor deseado.
- Antes de cocer la pasta, es muy importante secarla un poco. Para ello podéis usar o bien un secador de pasta o sino colgar los tallarines en perchas de la ropa (no es tan elegante, pero sirve). Lo dejaremos secar durante media hora - una hora aproximadamente.
- Y ahora sí, una vez tenemos nuestra pasta hecha, la cocemos con abundante agua y una pizca de sal durante 3-4 minutos.
Que os aproveche vuestra pasta casera!
Si buscáis idéas de con qué acompañarla, a nosotros nos encantan estos tallarines con salsa pesto y un montón de queso parmesano!