Esta torta dulce llamada "Hornazo" que hoy os traigo es típica del tiempo de Cuaresma, más concretamente es tradicional comerla el domingo después del de Resurrección. Pero para que vayáis practicando os la pongo ya! :P. La receta es la que comúnmente hacen en Puertollano (Ciudad Real), pero hay muchas otras, aunque si tengo que elegir me quedo con esta sin dudarlo! Porque esta riquísima!
Ingredientes: (Para 4 o 5 hornazos)
Para la masa de arranque:
100 gr de harina de trigo
100 ml de agua
2 gr de levadura fresca
Para la masa:
900 gr de harina de trigo
3 huevos
200 ml de aceite de oliva virgen extra
Piel de una naranja
Zumo de una naranja
Ralladura de uno o dos limones
125 gr de azúcar
50 gr de anís en grano
200 ml de agua
23 gr de levadura fresca (lo que queda del dado)
1 pizca de sal
Huevos cocidos (en este caso 4 o 5)
Para decorar:
1 huevo
Azúcar
Elaboración:
Primero se hace la masa de arranque, con los 100 gr de harina de trigo, los 100 ml de agua y los 2 gramos de levadura fresca. Se mezcla todo y se deja reposar durante 3 horas fuera de la nevera tapada con papel film. Mientras tanto vamos ha ir preparando el resto de la masa. Para ello ponemos en un cazo el aceite de oliva y la piel de la naranja, calentamos, quitamos la piel y dejamos que enfrié el aceite de oliva.
En otro cazo echamos los 200 ml de agua y los 50 gramos de anís en polvo, lo calentamos hasta que hierva, colamos el agua y dejamos que enfrié. También vamos a cocer los huevos, para ello los echamos en agua fría y los ponemos a calentar. Cuando empiecen a hervir contamos 5 minutos, los apartamos y ya estarán listos (se terminarán de cocer en el horno).
Cuando la masa de arranque haya reposado las 3 horas, vamos a añadirle el resto de los ingredientes. Es decir, el aceite de oliva, el agua anisada, el zumo de naranja, la ralladura del limón, los 3 huevos, el azúcar, la sal, la harina y la levadura fresca. Amasamos hasta obtener una bola de masa y procedemos a moldear los hornazos. Hacemos 4 o 5 tortas, ponemos un huevo cocido en medio de ellas y lo cubrimos con dos tiras de masa. Cuando ya los tengamos, los dejamos reposar durante 2 horas para que doblen su tamaño.
Después los untamos con huevo y los cubrimos con abundante azúcar espolvoreada. Precalentamos el horno a 200 grados y cuando los vayamos a meter lo bajamos a 180 grados. Los horneamos durante 30 minutos o hasta que los veamos bien dorados. Y ya estarán listos para comer! ;)
http://diy-net.blogspot.com.es/feeds/posts/default