Lógicamente no son los huevos escoceses originales, pero como ni siquiera son escoceses porque se empezaron a cocinar en Londres, en los almacenes Fortnum & Mason, pues los míos son de salmón y punto.
La esencia de la receta es la misma, eso si, se trata de un huevo cocido, ya sea de gallina o de codorniz, envueltos en carne de salchicha u otro ingrediente, especiados, rebozados y fritos, aquí os dejo mi versión:
INGREDIENTES (para 8 huevos de codorniz)
8 huevos de codorniz
600 gr. de salmón fresco, ya limpio de espinas y piel
5 ó 6 pepinillos
sal
pimienta negra
1 yema
1 huevo
pan rallado
aceite de oliva
Para la salsa
mayonesa casera
2 cucharaditas de eneldo seco
2 cucharaditas de mostaza, en mi caso Maille
alcaparras
-Cocemos los huevos de codorniz durante 4 ó 5 minutos, los pelamos y reservamos.
-Picamos el salmón a cuchillo en trocitos pequeños, salpimentamos. Picamos también los pepinillos. Lo ponemos todo en un bol y añadimos la yema de huevo (de gallina) y una cucharada de harina, mezclamos todo.
-Cogemos un poco de masa en las manos, metemos el huevo en ella e intentamos que quede en el medio bien envuelto con el salmón, hacemos lo mismo con todos los huevos.
-Rebozamos nuestras "pelotitas de salmón" en huevo batido y pan rallado y las freímos en abundante aceite, las pasamos a un plato con papel de cocina para quitar el exceso de grasa.
-Para hacer la salsa mezclamos todos los ingredientes y lo movemos bien, metemos en la nevera tapada con papel film hasta la hora de servir.
-Los huevos al llevar una salsa fría se pueden freir un rato antes de comer, no hace falta que estén calientes.
Ya sabéis que podéis ver el resto de huevos escoceses de mis compis de grupo en la página Desafío en la cocina. En julio y agosto no hay desafío, en septiembre volveremos con receta dulce.