Hola, ya estamos a miércoles, ecuador de la semana así que muy bienvenidos y como siempre mil gracias por leerme y por todos los comentarios que me dejáis.
Hoy toca truco y pero en vez de un truco mejor hacemos truco o trato, os parece? Jejeje, es broma, no es truco pero haré algo parecido, os enseñaré algunas de las cositas que hice en Halloween en años anteriores, por si os sirven de idea.
Ya expliqué otras veces que celebro Halloween desde hace muchos años porque no quiero celebrar difuntos, me entristece muchísimo y yo me acuerdo de los que no están cada día, así que desde hace muchos años he ido haciendo diversas celebraciones familiares.
Lo empecé a hacer cuando apenas se hacía por donde yo vivo pero a mí me apetecía y además nunca lo he considerado una fiesta americana sino celta, en el post del año pasado os expliqué un poco el origen, y es algo que me gusta celebrar.
Este año no sé lo que haré porque en una celebración familiar de las que siempre hice se iba a notar demasiado la ausencia de mi padre, así que voy a buscar una alternativa un poco diferente, lo celebraré pero sin que se parezca a lo de otras veces.
De todas formas guardo recuerdos geniales de esta fecha, pero muy buenos y me alegra haber pasado tantos momentos en familia.
Si os apetece leer alguna de las celebraciones las podéis encontrar en la etiqueta de cenas especiales, aunque os deja estos enlace aquí y aquí.
Y sin más rollo empezamos.
Yo siempre me preparo la decoración. Lo he hecho tantos años que he ido cambiando, unas veces usé guirnaldas, otras globos, otras calabazas del huerto que decorábamos, depende.
Y queda genial imprimir etiquetas para ponerlas en botellas de cristal. El año pasado reaproveché unas de un tomate frito, les puse etiquetas y rellené con la bebida.
Una idea es comprar lacitos naranja, coger tarros y rodearlos con el lazo, y dentro meter tiras de queso, chocolate o alguna chuche. Y el resto lo decoramos con calabazas de cartulina, podemos pegarlas en jarras y botellas.
Una idea muy resultona son las calabacitas de arroz. Solo hay que cocer arroz en zumo de zanahoria y calabaza, luego le damos forma redondita para que asemeje a una calabaza y los ojos y la boca los hacemos con aceitunas negras.
Y, ¿qué os parece una escoba comestible? Solo necesitamos palitos de pan y tiras de jamón York o queso.
Vale, ya faltaban algunas pero, ¿quién se resiste? Para los amantes del chorizo os sugiero unas lápidas con chorizo y pan de molde, se hacen muy fácilmente y molan mucho.
Para los más golosos podemos hacer la tarta de galletas de toda la vida en forma de cementerio, mmmmm.
O una calabaza hecha con mandarinas, es muy fácil solo hay que vaciar la mandarina, pintar una cara de calabaza y meter dentro lacasitos o algo así.
Y el chupachups fantasma se hace con una servilleta de papel, un rotulador negro y un chupachups o piruleta, más fácil imposible. ¿A qué mola?
Lo principal es pasarlo bien, poner ilusión y hacer que a los niños les quede un buen recuerdo. Yo creo que el mejor regalo que les podemos hacer a nuestros hijos es una buena infancia, crearles buenos recuerdos y momentos felices es algo impagable.
Y muchas veces eso no es cuestión de dinero, se puede hacer mucho con muy poco.
Bueno, pues hasta aquí mis ideas para Halloween, unas ideas muy sencillas pero que ayudan a crear buenos recuerdos, que al final es lo que queda, los momentos compartidos.
Muchísimas gracias por leerme y nos vemos mañana para reflexionar un poco.
Y vosotros;¿Celebráis Halloween?¿Os gusta la fiesta?¿Conocíais el origen de la fiesta?
Fuente: este post proviene de Pequeños trucos para sobrevivir a la crisis , donde puedes consultar el contenido original.
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