Hola !!! Como ha ido el fin de semana ??? El mío la verdad un poco ajetreado. Estos días el frío está apretando fuerte y la nieve ha caído muy cerca de donde vivo, así que hemos aprovechado con mi familia para dar un paseo por la montaña y pasar un fin de semana al aire libre. Como casi nunca nieva en mi ciudad, cuando cae la nieve por aquí cerca, solemos subir a las montañas cercanas para disfrutar de la nieve. Y de paso, visitamos alguno de los pueblos pintorescos que nos dan la bienvenida por el camino. Las niñas se lo pasan bomba, y nosotros disfrutamos viendo lo bien que se lo pasan.
Pero, eso de ir a visitar los pueblos es muy peligroso, para el bolsillo me refiero :) Te paras en un pueblo y te llevas unas garrafas de aceite porque se dice que el aceite de oliva de esa zona es muy bueno, pues hay que aprovechar, ¿no? Te paras en otro y te llevas unas botellas de vino, porque claro, es de denominación de origen de aquella zona, y no te puedes ir de allí sin llevarte alguna botellita. Das una vuelta por la plaza del pueblo y te pasas por la panadería, pues claro, el pan y las pastas hechas a leña en la ciudad casi no se encuentran, pues venga a cargar panes de pueblo, hasta para regalar. Bueno, bueno, haces cuentas y el día de excursión te ha salido más caro que ir a París.
Las vistas de montaña, tan bonitas y los prados nevados, los pantanos tan tranquilos que te dan una sensación de paz tremenda, y lo bien que se lo pasan los niños haciendo el muñeco de nieve, tirándose bolas de nieve todo el día y sin molestar a nadie, no tiene precio. Así que la semana que viene, como sigue estando la nieve por aquí cera, igual repetimos, no sé si me llevaré las garrafas de aceite, las botellas de vino, y el pan, pero si voy a dar ese paseo por la montaña con mi familia y voy a comer en algún restaurante de estos tan rústicos que hay en los pueblos. Comer una buena escudella y carne a la brasa que me encanta, con su guarnición de chanfaina y espárragos a la brasa, y para terminar una rica crema catalana casera de postre. Así de sencillo y delicioso, ni más ni menos.
Bueno pues después del fin de semana ajetreado, toca vuelta a la rutina. Y esta semana vuelvo de nuevo con el Reto "Reposteras por Europa". La anfitriona del Reto este mes fue Patricia, la autora del blog "Patty"s Cake". La Patricia tiene un blog estupendo, con un recetario muy variado y exquisito. Si no conocéis su blog no dudéis en visitarla, os encantará estar en su cocina. El país que eligió ella para visitar este mes, fue Bulgaria. Nada más ver el país elegido, ya sabia lo que iba a preparar para el Reto.
Bulgaria es país vecino de mi país, el país donde yo había nacido y había vivido la mitad de mi vida, antes de venir a España. Los que me seguís desde el principio, sabéis que llevo viviendo casi 20 años en España y que soy de Macedonia. Macedonia es una república de antigua Yugoslavia, que por desgracia de Yugoslavia ya no existe nada, solo los recuerdos y las menciones en los libros de historia, que hablan sobre aquel país que alguna vez había existido y que ahora es historia. Por suerte, las personas y el territorio, si están allí, con otro nombre o nombres, separado y dividido y como si no pasará nada. Pero si pasa, porque hay unas generaciones que se acuerdan de aquella Yugoslavia, se acuerdan del país en el que han vivido unos años inolvidables y una niñez estupenda. Se acuerdan de las selecciones de basket, voleibol, balomano, vaterpolo... unos guerreros que ganaban títulos, y tu los animabas desde tu sofá o en el pabellón mismo, porque era tu país. Mi marido que había sido deportista profesional, y había jugado partidos para la selección yugoslava (luego para la macedonia por supuesto), le costó mucho asimilar todo ese cambio. Como se siente que de un día para otro te digan que la selección yugoslava ya no existe, que los compañeros con los que estabas jugando codo con codo, ahora son tus contrincantes y están en el otro lado de la red. Como te sientes cuando en las cadenas de televisión los programas serbocroatas se tienen que traducir, cuando tú estudiabas serbocroata en colegio como si fuera tu segundo idioma (porque en mi país se habla macedonio), y lo hablabas a la perfección, ¿y ahora te lo estaban traduciendo? Como te sientes cuando para ir de vacaciones al mar Adriático, que era el mar de tu país e ibas con tus padres casi todos los veranos de vacaciones, ahora tienes que llevar el pasaporte para cruzar la frontera, porque claro, entras en otro país, etc. ¿Como se traga todo esto? Es tan difícil convivir y respetarse unos a otros ??? No lo entiendo, no lo he entendido y no lo entenderé nunca.
Y ahora estaba escuchando el otro día en la televisión, que la justicia internacional había proclamado, que no encuentra indicios para culpar a...(?) por lo que había pasado en antigua Yugoslavia en aquellos años. ¿Como que nadie es culpable? Me están tomando el pelo ??? Y todo el daño que se había hecho, de una forma u otra, entre la gente que no tenia y no tiene culpa de nada ???
Y cuando escucho en la televisión todo lo que está pasando últimamente en España (perdonarme, no quiero que se ofenda nadie) pienso, tiene que haber alguna forma de solucionar esto con diálogo, en paz y sin que nadie salga perjudicado.
A veces, me paso épocas largas sin poner el telediario, porque las noticias no me gustan nada, y sinceramente me deprimen, prefiero estar paseando por la playa o la montaña, o estar con mi blog y tener la mente ocupada en cosas positivas y sanas.
Y disculpar porque me estoy desviando del tema. Pero cada vez que se me pasa por la mente la palabra Yugoslavia me pongo, nostálgica, furiosa, confusa, sentimental, es una mezcla de sentimientos que no sabría explicar, lo siento :(
Lo que realmente os quería decir es que agradezco haber nacido y vivido toda mi infancia y adolescencia en Macedonia, eso hace que conozca la cultura gastronómica tanto de los países de antigua Yugoslavia (Croacia, Serbia, Eslovenia...) como de Bulgaria y Grecia, los países vecinos de mi país. Y os puedo asegurar que en todo estos países de los Balcanes la cultura gastronómica esta casi igualada, similar o que se asemeja bastante. Así mismo la receta que os traigo hoy es típica de Bulgaria, pero también de mi país.
Las raíces de estas similitudes se tienen que buscar en la historia, pero este es un tema que dejaré para otro día. Lo único que voy a mencionar es, que esta gastronomía posee una mezcla de influencias procedente de los países del este de Europa y de ciertas cocinas del mediterráneo, sobre todo una fuerte influencia de la cocina turca, como también de la austriaca y la húngara.
El Kozunak (Milibrod en Macedonia) es un brioche rústico y típico de Semana Santa, de los países Balcanes. De echo se le conoce como el brioche de los Balcanes. Se elabora con harina de fuerza, leche, huevos, mantequilla o manteca y se rellena con mermelada de ciruela negra (que aquí cuesta encontrarla), uvas pasas, o un relleno de almendras con chocolate (es el que os trago hoy).
Se puede presentar o elaborar en forma de trenza larga, en forma de rollo, o en forma de trenza enrollada, que es como lo he preparado yo en esta ocasión.
¡Espero que os guste y que os animéis a prepararlo!
Utensilios necesarios:
Báscula de alimentos, jarra mediadora, rodillo, pincel de cocina, papel de horno, bandeja de horno y batidora de pie o de dos varillas (amasadoras).
Si os apetece ver las propuestas del resto de mis compañer@s o si os animáis a participar en el Reto, solo tenéis que pinchar en el logo y os llevará al blog de Pili. La Pili es la autora del blog "Tothom a la cuina", y es la que organiza este Reto. En su blog encontraréis toda la información necesaria sobre las bases del Reto, y también dentro de 24 horas podréis ver un recopilatorio con todas las recetas participantes.
- Si quieres ver otras recetas de bollos, panes y masas levadas, te dejo estos enlaces:
Buchteln
Caramel Apple Cinnamon Rolls
Kugelhopf
Panecillos de leche con chips de chocolate
Panettone clásico
Savarin
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¡Hasta dentro de unos días, os espero por aquí!
Besos !!!