Ayer Viernes Santo hice otros de los postres tradicionales de la Semana Santa y Cuaresma, la leche frita, que junto a las torrijas son dos de mis postres preferidos y de mi familia, es hacerlos y desaparecen en un momento....
El aspecto recuerda a las torrijas, con el azúcar y la canela, aunque no tienen nada que ver.
Ingredientes (4 personas):
1l. de leche.
250gr. de azúcar.
80gr. de maicena.
3 yemas de huevo.
1 rama de canela.
1 trocito de piel de limón.
50gr. de mantequilla.
Aceite de oliva suave.
Harina para rebozar.
2 o 3 huevos para rebozar.
Azúcar y canela molida para rebozar la leche frita.
Modo de hacerlo:
Pon a cocer la leche (reserva un vaso para la maicena) con la canela en rama y la piel de limón, añade el azúcar.
Deshaz la maicena en la leche reservada fría, añade las yemas de huevo batidas y remueve hasta que se forme una sola mezcla.
Cuando la leche haya hervido unos minutos, baja el fuego y retira la canela y la piel.
Pon con cuidado y removiendo continuamente la mezcla de yemas a la leche hervida. No dejes de remover en ningún momento porque se pega enseguida. Deja cocer unos minutos, retira del fuego.
Añade la mantequilla reblandecida y mezcla bien.
Unta con un poco de mantequilla un molde rectangular y pon la pasta extendida en él. Si quieres los trozos de leche frita más gorditos ponlo en un molde más pequeño. Espera a que se enfríe.
Corta en cuadraditos del tamaño que quieras, rebózalos por harina y huevo.
Fríelos en abundante aceite caliente, pásalos a un plato con papel absorvente y luego por otro con azúcar y canela en polvo.
Te aconsejo que cuando los reboces en la harina y el huevo utilices una paleta para girar los trozos porque se te pueden romper.
Espero que te guste.