Hace poco me enteré del concurso que Pequerecetas preparaba con Tulipán en el que había que participar con una receta hecha con margarina de la marca. Yo la verdad es que casi todos los bizcochos los preparo con margarina Tulipán, me gusta más y me resulta más fácil de mezclar y más sana, claro. Es por eso que no me tuve que comer mucho la cabeza en cómo sustituirla para este concurso de PequeRecetas.
Lo que más me costó fue elegir los ingredientes principales del bizcocho, pero estando en diciembre y con la Navidad tan cercana, no lo dude: castañas... y chocolate. Es una combinación fantástica para cualquier bizcocho. Además, si le añades el toque de las especias, tienes un resultado increíble. Y, para darle un toque navideño, decidí añadirle este glaseado con el que le daba el punto nevado tan especial. Ha sido un resultado fantástico.
Llevaba tiempo queriendo usar castañas en una receta y esta ha sido la oportunidad perfecta. Me encanta la crema de castañas y sabía que en un bizcocho iba a quedar fantástica, a pesar de no haber probado hasta ahora el bizcocho de castañas. Yo os animo a que lo probéis, sobre todo ahora, en invierno, cuando encontrar castañas no es tan difícil. Y animaos a prepararlo con margarina porque la textura es fantástica y queda más húmedo, algo que a mí me encanta.
Loaf cake especiado de chocolate y castañas
Dificultad: Fácil
Tiempo horneado: 50 mins (aprox)
Raciones: 10
Etiqueta: Postre, Navidad
Para la crema de castañas
500 gr de castañas
Un chorro de leche
Cuatro cucharadas de azúcar
Para el bizcocho
4 huevos
260 gr de azúcar moreno
120 ml de nata (crema de leche)
100 gr de margarina Tulipán
230 gr de harina
Cinco cucharadas de crema de castañas
6 gr de levadura
3 cucharadas de cacao en polvo puro
100 gr de chocolate con leche
Una cucharadita de canela
Media cucharadita de jengibre
Media cucharadita de nuez moscada
Para el glaseado
100 gr de azúcar glacé
Cuatro cucharadas de nata (crema de leche)
Una cucharadita de agua
- Comenzamos con la crema de castañas. Lavamos bien las castañas, les hacemos un pequeño corte o incisión (para que cuando al cocerlas aumenten su tamaño, no "exploten" por la presión) y las colocamos en una cacerola amplia.
- Cubrimos las castañas con agua y las llevamos a ebullición. Dejamos hervir durante 25 minutos, más o menos, hasta que veamos que están tiernas por dentro.
- Sin dejar que se enfríen, vamos pelándolas y colocándolas en un vaso de batidora.
- Añadimos un chorrito de leche, al gusto, y el azúcar y batimos todo junto hasta conseguir una crema homogénea. Podemos añadir un poco más de leche si vemos que se ha quedado muy espeso.
- Reservamos en frío hasta su uso. Es perfecta para acompañar platos dulces o añadir a bizcochos.
- Seguimos con el bizcocho. Precalentamos el horno a 200ºC.
- Engrasamos bien un molde de loaf cake o un molde redondo con una pizca de margarina.
- En un bol mezclamos bien los huevos con el azúcar.
- Cuando la mezcla comience a blanquear, añadimos la nata (crema de leche) tibia.
- Tamizamos la harina con la levadura, la canela, el jengibre y la nuez moscada y lo añadimos a la mezcla, mezclándolo todo bien con una espátula.
- Añadimos la margarina Tulipán derretida y mezclamos bien.
- Añadimos la crema de castañas que hemos preparado previamente y mezclamos hasta conseguir una masa homogénea.
- Volcamos la mitad de la masa sobre el molde.
- A la otra mitad de la masa le añadimos el cacao puro y mezclamos bien.
- Vertemos el resto de la masa sobre el centro del molde, para que quede la parte de chocolate hundida justo en el centro del bizcocho.
- Cortamos el chocolate en cubos y los esparcimos sobre la superficie del bizcocho. Estos cubos quedarán un pelón crujientes cuando se enfríen y estarán deliciosos.
- Metemos en el horno y horneamos a 200ºC durante cinco minutos.
- Pasado ese tiempo, abrimos el horno y hacemos un corte en el centro del bizcocho, una línea gruesa. Con este corte conseguiremos que nos crezca más cel centro que de los lados.
- Bajamos la temperatura a 160ºC y horneamos durante 40 minutos más. Comprobamos la cocción de la masa con un palillo: si sale limpio está listo.
- Dejamos enfriar cinco minutos en el molde y desmoldamos.
- Dejamos enfriar por completo.
- Mientras, para el glaseado, en un bol mezclamos el azúcar glacé tamizado con la nata (crema de leche) líquida y el agua, consiguiendo un glaseado líquido delicioso.
- Vertemos el glaseado sobre el chocolate y dejamos que enfríe. Podemos decorarlo con grosellas y hojas comestibles si lo deseamos, o dejarlo así, tal cual, nevadito.
- Servimos en frío.
¡A disfrutar!
Fuente: este post proviene de Jaleo en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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