Es la historia de dos hermanos, Hansel y Gretel, que tienen que luchar contra muchas dificultades que les pone la vida.....pero que juntos, y gracias a su ingenio y fuerza de voluntad, pudieron salir adelante y cambiar su destino.
La mayoría de los cuentos clásicos tenían su moraleja de las que podemos sacar buenas enseñanzas; la de Hansel y Gretel es la búsqueda, dentro de la mala suerte, de la buena suerte para tener un final feliz!!
Estamos a 23 de abril, y hoy es el Día Mundial del Libro. ¿Pero sabes por qué y para que se celebra?
El porqué de elegir este día y no otro se decidió porque el 23 de abril es un día señalado para la literatura mundial, ya que este día, en 1616, fallecieron Miguel de Cervantes, William Shakespeare y Garcilaso de la Vega.
El Día del Libro siempre lo celebramos en el reto Typical Spanish, con una receta unida a la literatura, una receta que aparezca en un libro que hayamos leído, en cualquier libro, y cualquier receta.De otros años tengo publicados los Duelos y Quebrantos de "El Quijote", y una Empanada de carne de "En el país de la nube blanca".
Ahora mismo estoy leyendo la continuación de la novela "Yo Julia" de Santiago Posteguillo, pero como aún estoy empezando, no he visto de momento, ninguna receta para hacer.
He leído casi todos los cuentos del libro, pero al cogerlo, se me abrió en la página de los hermanos Juanito y Margarita, (Hansel y Gretel en español) y me acordé de cuando la vieja de la casa de chocolate, salió y les dijo:
Hola, pequeñines, ¿Quien os ha traído? Entrad y quedaos conmigo, no os haré ningún daño.
Y cogiéndolos de la mano, los introdujo en la casita, donde había servida una apetitosa comida: leche con bollos azucarados, manzanas y nueces.
Ingredientes:
Para el prefermento o masa madre:
90g. de harina de fuerza o normal.
50g. de leche.
3g. de levadura fresca.
Para la masa de los bollitos:
Toda la masa madre.
340g. de harina de fuerza.
120g. de leche.
2 huevos. (110g)
80g. de azúcar.
15g. de levadura fresca.
5g. de sal.
60g. de mantequilla a temperatura ambiente.
1 palito de canela.
Corteza de naranja.
Modo de hacerlo:
Prepara el día anterior la masa madre:
Disuelve la levadura en la leche tibia.
Mezcla la leche con la harina y amasa un par de minutos hasta conseguir que esté todo unido y la masa sea homogénea, haz una bola.
Deja que repose la masa una hora a temperatura ambiente.
Pon la masa en un bote hermético o en un bol tapada con film, y déjala en la nevera hasta el día siguiente.
Mientras se atempera la masa prepara la leche aromatizada:
Hierve la leche con una rama de canela y la corteza de la naranja.
Deja que hierva durante unos 5 minutos para que se infusionen los aromas, apaga el fuego y deja que se enfríe.
Cuando la leche esté fría y la masa atemperada, vamos con la masa de los bollitos:Primero de todo tienes que pesar la leche porque al hervir, siempre se pierde un poco ya que se evapora, y necesitas 120g.
Pon en un bol la masa madre desmenuzada junto a todos los ingredientes de la masa menos la mantequilla que la añadiremos más tarde.
Guarda un poco de la leche al principio por si te queda la masa demasiado líquida y no necesitas ponerla toda. La masa se tiene que pegar un poco al principio, no quedar líquida, pero si ves que está seca añade toda la leche.
Una vez tengas unidos todos los ingredientes pero sin amasar, deja que se repose unos 10 minutos, así verás que después se pega menos y es más fácil de amasar.
Ahora mezcla y amasa durante 5 minutos doblando la masa sobre si misma y haciéndola girar sobre la mesa.
Añade la mantequilla ablandada y cortada en trozos y mezcla bien apretando y moviendo toda la masa con la mantequilla sobre la encimera hasta que veas que está toda incorporada y unida.
Cuando esté unida la mantequilla, deja que repose la masa un par de minutos.
Trabaja y amasa durante unos 10 minutos o hasta que veas que la masa está suave, lisa y brillante.
Haz una bola y deja que fermente en un bol hasta que doble su volumen. Depende de la temperatura de donde la tengas, pero tardará un par de horas más o menos.
Una vez haya doblado el volumen, pásala a la mesa de trabajo y desgásala apretando con las manos, deja que repose unos 10 minutos.
Corta la masa en trocitos de unos 60 o 70g. y forma bolitas con ellos.
Pon las bolitas de masa separadas sobre una bandeja con papel de horno y deja que reposen tapadas con un trapo durante unas 2h para que doblen su volumen.
Mezcla un poco de azúcar con unas gotas de agua de azahar.
Cuando hayan doblado su volumen haz un corte con las tijeras en la parte de arriba de cada bollito.
Pinta cada uno con yema de huevo.
Pon montoncitos de azúcar mojada sobre cada bollito.
Precalienta el horno a 180º con calor arriba y abajo.
Hornea durante unos 15 minutos, hasta que veas que están dorados, ten cuidado porque se pueden quemar.
Saca del horno y deja que se enfríen.
El Día Internacional del Libro Infantil fue el 2 de abril, pero como no pude publicar ninguna receta, he querido dedicar este día de hoy a los cuentos infantiles con moraleja....que también nos sirven a los mayores!!
Espero que te guste.
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Fuente: este post proviene de Mandarinas y Miel, donde puedes consultar el contenido original.
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