#MadredelAmorHermoso, parece que hace un siglo que no paso por aquí... aunque ahora que lo pienso, ¡casi lo hace!
Como dicen los artistas: "creo que me ha abandonado mi musa". Claro que es que prefiero pensar eso y no que estoy en fase apática total (cada uno se consuela como quiere, jajaja).
Aún así, no podía dejar pasar esta época zanahoriera que me brinda mi tierra sin compartir con vosotros alguna churretosada naranja... sí, el señor Bigotes está en plena campaña y este tubérculo inunda nuestra casa durante esta época, así que lo mejor será aprovechar ¿no?
Por eso, me he enfundado el delantal, he puesto a funcionar la KA y he horneado estos Macarons especiados de zanahoria y coco, a los que, por supuesto, he bañado en un poquito de cocholate... ¡qué se le va a hacer, si una es de ideas fijas!
MACARONS ESPECIADOS DE ZANAHORIA Y COCO
CONCHAS
(Aproximadamente 72 Conchas, es decir, 36 Macarons de 4 cm de diámetro)
150 gr harina almendra (almendra molida muy fina, la de Mercadona vale)
50 gr coco rallado
200 gr azúcar glas comercial (No lo hagáis en casa)
40 gr agua
200 gr azúcar
70+70 gr clara huevo (4 Claras) envejecidas (separadas de las yemas al menos 1 día antes) y a temperatura ambiente
1 pizca sal
1/2 cucharadita rasa canela molida
1/2 cucharadita rasa jengibre molido
Manga Pastelera Desechable y Boquilla Redonda Wilton Nº 6 (PME nº 16)
RELLENO
150 gr de zanahoria cocida
60 gr de azúcar
60 gr de coco rallado
DECORACIÓN
Cocholate postres 70% derretido
Coco rallado
Para hacer las Conchas
1. Preparación de las Bandejas
Lo primero es preparar las bandejas donde vamos a hornear los macarons, si no después tenemos que entretenernos mientras nuestra masa se seca.
He fabricado una plantilla en el papel de hornear.
He dibujado círculos con un lápiz, todos del mismo tamaño, sobre el papel vegetal, para delimitar el espacio sobre el que poner la masa del macaron y que no salgan unas conchas más grandes que otras.
Luego he puesto otro papel vegetal encima para que la masa no toque el carboncillo del lápiz con el que he dibujado los círculos, éste será sobre el que ponga la masa del macaron y poned bastante si no queréis que os salga un churro.
2. Preparación de la Masa
- Mezclamos la harina de almendra con el coco, la canela, el jengibre y el azúcar glas. Es necesario hacerlo con procesador de alimentos, la thermomix o una picadora puede servir.
Este paso es importante para que la mezcla quede superfina e integrada.
Hay que procesarla poco a poco para que no se forme una pasta (dado el contenido graso de la almendra), por ejemplo de 50 en 50 gr, a velocidad máxima durante 20-30 segundos.
Tamizar el resultado de la mezcla para conseguir una concha lisa.
Yo uso un colador, sin que los agujeritos sean extremadamente pequeños, si no la almendra no pasa ni de broma, creerme, lo he intentado.
Añadimos la mitad de la clara a esta preparación consiguiendo una especie de mazapán.
- Para el Almíbar, ponemos el agua y el azúcar en un cazo al fuego hasta que alcance 115-120º C, es el llamado punto de bola que podéis ver en el Vídeo de Patricia, es muy útil para aquellos que no tengáis termómetro.
- Mientras el almíbar alcanza la temperatura, usaremos unas varillas eléctricas, en mi caso la KitchenAid, para montar la otra mitad de las claras envejecidas a temperatura ambiente con la pizca de sal.
Primero un par de minutos a velocidad baja y luego a velocidad media y sin dejar de batir.
Cuando empiece a blanquear, añadir el almíbar muy poco a poco, en forma de hilo.
¿Hasta cuando se bate? Hasta que se formen picos suaves (no interesa un exceso de batido) y nuestras claras luzcan brillantes.
Pueden pasar unos 8-10 minutos y habrá que esperar hasta que esté casi frío.
A partir de aquí, se hará de forma manual.
- Añadir poco a poco el merengue al mazapán que teníamos reservado y con una espátula proporcionar movimientos envolventes para su integración, justo hasta que esté perfectamente integrado, pero sin excedernos, no queremos que se bajen las claras y la masa de los macarons se quede líquida.
Cuando hayamos conseguido nuestra masa homogénea y sin grumos, la introducimos en una manga pastelera, yo he usado la boquilla redonda del número 6, para dosificar la cantidad de masa de nuestros macarons.
3. Formación del Macaron, Secado y Horneado
- La masa del macaron se pone sobre el delimitado del círculo con ayuda de la manga pastelera con boquilla redonda del número 6 Wilton o 16 PME, habrá que ponerla de forma perpendicular en el centro del círculo sin tocar el papel, presionarla con suavidad y de forma constante... cuidado de no pasarse de la línea, dejar de presionar y retirar la manga al mismo tiempo.
Damos unos golpecitos a la bandeja para eliminar posibles burbujas de aire en nuestra superficie que harían menos lisas nuestras conchas.
-Ahora llega la fase de secado, los he dejado reposar en la bandeja 30-40 minutos, pero dependerá de la humedad ambiente, tienen que estar secos al tacto antes de ser horneados.
Es muy importante un buen secado para que se cree una costra en la superficie y el aire del interior no se escape durante el horneado, es así como se forma ese piececito tan característico.
- Introducir en el horno a 150º C posición arriba y abajo, en la parte media-baja durante 10-15 minutos, dependerá del horno, el mío ya sabéis que es un poco lento y los he dejado los 15 minutos.
Enfriar sobre una rejilla y reservar en un recipiente cerrado en el frigorífico hasta el momento del montaje. Recomendable al menos un día de reposo para que estén de rechupete.
Para hacer el rellenoTriturar las zanahorias cocidas y mezclar con el azúcar.
Ponemos al fuego para que se derrita el azúcar y se mezcle bien con la zanahoria. Con unos minutos será suficiente.
Agregamos el coco rallado a la mezcla de zanahoria y reservamos hasta que se enfríe.
Montaje y decoración
Lo primero que suelo hacer es colocar las conchas por parejas, así me aseguro que pongo 2 conchas similares para formar el macaron y queda estéticamente curioso.
En este caso, una de las conchas de la pareja la he bañado en cocholate derretido, las he espolvoreado con coco rallado y he esperado hasta que el cocholate se ha solificado (puedes aligerar el proceso metiendo en la nevera).
Sobre la otra concha de la pareja, colocar el relleno de zanahoria y coco. He tenido que hacerlo con las manos y con mucho cuidado... el relleno es sólido y no se puede poner con manga pastelera, además las conchas son delicadas y hay que ir con mucho tacto.
Encima del relleno, y antes de colocar la concha cocholateada, poner un poquito de cocholate derretido y, ahora sí, la concha para que quede pegada y no se desmonte nuestro macaron.
Una vez montados, los guardo en el frigo hasta el momento de hincarles el diente.
Vaya parrafada sobre la elaboración de la concha... pero no vayáis a salir corriendo, que aunque la verdad es que esto de hacer macarons tiene su intríngulis, no es que sea tan difícil oigan, que si yo puedo, puede cualquiera. Sólo necesita dedicación y práctica, eso sí, no hay que tenerle miedo a nada en esta vida, que si no salen a la primera, ya saldrán a la segunda o a la tercera... porque si de algo estoy segura es de que merece la pena intentarlo, porque el resultado es impresionante.
Nos vemos pronto Churretos@s.
Besos.
Raquel