Mousse de yogur con arándanos caramelizados.
El comienzo del curso ya está aquí, a la vuelta de la esquina y con él llega el otoño así que antes de que cambie el tiempo, disfrutemos de un dulce fresquito y ligero que nos endulce los días de vacaciones que nos quedan.
El toque de los arándanos solo hace que sea más delicioso pero si no os gustan o preferís otra fruta, no dudéis en cambiarlos por alguna mermelada o simplemente por trocitos de fruta fresca. Yo me decidí por ellos porque es una fruta que me encanta, como todas las frutas del bosque en realidad, y porque estaban a muy buen precio y eso hay que aprovecharlo.
¿Qué necesito?
600 gr de yogur natural sin azúcar80 gr de azúcar
200 ml de nata (crema de leche) para montar
2 claras de huevo
6 placas de gelatina (unos 10 gr)
Para los arándanos:
150 gr de arándanos
100 gr de azúcar
1 cucharada de zumo de limón
30 gr de agua
¿Cómo lo hago?
Para empezar montamos las claras a punto de nieve y también la nata (crema de leche). Recordad que para favorecer que estos alimentos se monten bien, las claras es mejor que estén a temperatura ambiente; en cambio la nata (crema de leche) debe estar lo más fría posible.Una vez listas la nata (crema de leche) y las claras, ponemos en remojo, durante unos 5 minutos, las hojas de gelatina en un bol con agua fría.
Cuando la gelatina esté blandita, retiramos casi toda el agua (dejamos solo unas tres cucharadas) y ponemos las hojas con esa cantidad de agua en un cazo y lo calentamos a fuego bajo, revolviendo continuamente, hasta que la gelatina se haya disuelto (con un minuto o menos será suficiente).
En otro bol, mezclamos bien el yogur con el azúcar; después añadimos la gelatina ya disuelta; por último la nata (crema de leche) y las claras, que incorporaremos con movimientos envolventes para que no se bajen.
Vertemos la mousse en vasitos individuales y reservamos.
Ahora vamos a preparar los arándanos. Para ello primero los lavamos y secamos bien.
En un cazo, derretimos el azúcar hasta conseguir un caramelo de color dorado (mucho cuidado con las quemaduras de caramelo, que son tremendas). Añadimos los arándanos, el agua y el zumo de limón. Removemos todo cuidadosamente y dejamos cocer durante unos 10 minutos a fuego bajo. Cuando estén listos, los dejamos enfriar durante unos minutos y los colocamos en los vasitos, encima de la mousse.
Para terminar y, antes de poder devorarlas, las dejamos reposar en la nevera durante unas horas.